Cap.

 1      1|       nervios a don Fermín; era un escándalo andando. No había más que
 2      1|      atravesaron el crucero no sin escándalo de algunas beatas que interrumpieron
 3      2|           un crimen, y se habló de escándalo, y de quemar un libro de
 4      2|          sufre por amor de Dios el escándalo de los oídos. El Arcediano
 5      2|            una gollería. Pero, ¡oh escándalo!, ahora (don Custodio lo
 6      3|         creyó la historia.~ ~ ¡Qué escándalo! Doña Camila cogió a Anita
 7      4|          contra la naturaleza), el escándalo corrió de boca en boca,
 8      6|        pone varas a la Regenta.~ ~ Escándalo general. Murmullo en el
 9      7|              Ayer creo que hubo un escándalo en la catedral, que el Palomo
10      8|          favorito actual eraoh, escándalo del juego natural de las
11      8|         algún fraile pícaro; y con escándalo de Bedoya y de Bermúdez
12      8|           el oportuno remedio, sin escándalo, pero sin rodeos.~ ~ Pero
13      8|            que hubiera miedo de un escándalo».~ ~ A Paco, a su adorado
14     10|           esto lo suprimían. «¡Qué escándalo!»~ ~ -Pero, niña -prosiguió -,
15     11|       sacristía «el final de aquel escándalo».~ ~ El arcediano y el beneficiado
16     11|          su mal, que había sido un escándalo que apenas se pudo sofocar
17     12|       principal era mirar si había escándalo en precipitarse y tomar
18     12| recibiéndolas del pueblo. Con gran escándalo de su corazón sencillo y
19     13|          Ya ven ustedes, eso es un escándalo! -decía el Marqués, que
20     14|          en esa habitación... ¡qué escándalo!», pensó don Fermín, que
21     15|            Parece que necesitas el escándalo, quieres perderme.~ ~ -¡
22     15|      quieres. Lo de hoy ha sido un escándalo.~ ~ -Pero si yo le juro
23     15|          su modo, el perjuicio del escándalo. A veces quería Fermín ayudarla,
24     16|  exquisitas le prometía, en vulgar escándalo de las pasiones bajas de
25     17|            también le hablaron del escándalo del teatro. «Habían ido
26     17|            del pueblo mira como un escándalo la infracción de ciertas
27     17|            No entendía aquello... ¡Escándalo! ¡Ella, que en el teatro
28     20|            la autoridad, creció el escándalo, los enemigos del Magistral
29     20|          que dice el público... El escándalo crece...~ ~ Era verdad.
30     20|          por gastadas, pero con el escándalo nuevo, con lo de esa mala
31     20|            que aborrecido. Pero el escándalo de don Santos el de los
32     20|           puedo fraternizar con el escándalo, aunarme con la desfachatez
33     20|            todos ser trompetas del escándalo, para que tanto sea, y a
34     21|           era demasiado..., era un escándalo. Si el decoro lo permitiese...,
35     21|       simonía, soberbia, sordidez, escándalo...! ¿Qué tenía él que ver
36     22|          todo lo cual fue mayor el escándalo, y no se habló en mucho
37     22|        caserón de los Ozores! ¡Qué escándalo! Todo se lo iba a llevar
38     26|           Casino; y para colmo del escándalo, según don Pompeyo, so capa
39     26|           no pensaba más que en el escándalo de aquella exhibición. «
40     26|           aquella exhibición. «Sí, escándalo era; la mujer de su casa,
41     30|         esperar, hay que evitar el escándalo, y sobre todo hay que evitar
42     30|            la justicia... Temía el escándalo, la novedad de ser un criminal
43     30|           vio que «no estallaba un escándalo», que don Fermín mostraba
44     30|            iba ciego, no iba a dar escándalo.~ ~ «Acaso se le había ocurrido
45     30|       verdad es que aquello era un escándalo.~ ~ Joaquín Orgaz defendió
46     30|         que les causaba aquel gran escándalo que era como una novela,
47     30|            de lo ocurrido. ¡Era un escándalo! ¡Un adulterio descubierto! ¡
48     30|    Custodio a su lado, hablaban de escándalo, de hipocresía, de perversión,
49     30|        maledicencia, a olfatear el escándalo, a saborear el dejo del
50     30|          tuo.~ ~ -¡Y sobre todo el escándalo! -añadía doña Rufina indignada,
51     30|      después de una pausa.~ ~ -¡El escándalo! -repetía el coro.~ ~ -¡
52     30|          ella no había dado ningún escándalo.~ ~ Sí, sí, el escándalo
53     30|           escándalo.~ ~ Sí, sí, el escándalo era lo peor; aquel duelo
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