1-1000 | 1001-2000 | 2001-2295
     Cap.

2001     27|              toda la noche. Pero esto era achaque antiguo ya. Desde
2002     27|          había acabado, que Ana ya no era suya, que iba a perderla,
2003     27|             que aquel viaje al Vivero era ridículo; que si estaba
2004     27|               estaba allí Mesía, como era casi seguro, todas las ventajas
2005     27|             El sombrero de teja larga era odioso; demasiado corto
2006     27|               odioso; demasiado corto era cursi, ridículo, parecía
2007     27|            sentir remordimientos. «Él era cura, cura, una cosa ridícula,
2008     27|         quería demostrarle que además era hombre. «¡Y sí era hombre,
2009     27|             además era hombre. «¡Y sí era hombre, vive Dios que era
2010     27|             era hombre, vive Dios que era hombre, y tanto y más que
2011     27|               se llega a tiempo. Esta era toda su filosofía. El cochero
2012     27|          Teresa eternidades... Vamos, era otra. ¿Y salud? Como un
2013     27|               loma y el altozano, que era lo más espeso. Subía un
2014     27|               señores graves. Benítez era joven, pero prefería hacer
2015     27|              cambiar de vida; pero no era enfermedad..., por eso no
2016     27|              por temperamento... Ayer era mística, estaba enamorada
2017     27|               que usted cree que ayer era devota, exageradamente devota
2018     27|          bosque.~ ~ -¡Es verdad! ¿Qué era de ellos? Hay que buscarlos...
2019     27|               un purgatorio y aquello era ya el colmo. «Los otros
2020     27|         dibujada malicia al decir que era un misterio la conducta
2021     27|               la casa.~ ~ El miedo ya era general.~ ~ -Ea, ea, señores -
2022     28|      Quintanar comprendió que aquello era una insolencia, pero estaba
2023     28|          cuando menos. «¿Por qué? ¿No era lo probable que estuvieran
2024     28|                  dispuesto a matar si era preciso..., ciego...~ ~ -¡
2025     28|              ha habido».~ ~ Lo cierto era que don Víctor, al cabo,
2026     28|             cierta clase de empresas, era lo cierto que había retrocedido
2027     28|          tenía todo aquello; el mundo era como el confesonario lo
2028     28|             del vicio... Buena prueba era él mismo, que a pesar de
2029     28|           bajos. Y al fin Teresina... era de su casa, pero Petra era
2030     28|            era de su casa, pero Petra era de la otra, de Ana. Ya no
2031     28|          merecía el mundo entero, que era un lodazal... ¡Oh, aquellos
2032     28|                Lo que más le irritaba era que su conciencia le envolvía
2033     28|            general desprecio... «Todo era pequeño, asqueroso, bajo...,
2034     28|         brazos de don Álvaro..., ¡que era fatal aquella caída...!
2035     28|         atormentaba con sus punzadas, era la del ridículo.~ ~ «¡Qué
2036     28|     principalmente.~ ~ «El misticismo era una exaltación nerviosa».~ ~
2037     28|               Además, el Magistral no era un místico; lo menos malo
2038     28|             que se podía pensar de él era que se proponía ganar a
2039     28|               sociales..., a lo menos era cosa menos repugnante...
2040     28|           pecado de querer a un Mesía era ya poco menos que nada,
2041     28|                 Abominable! ¿Pues qué era lo que él, don Álvaro, tenía
2042     28|             sabía ella!, pero aquello era una delicia mucho más fuerte
2043     28|               por aquella noche. Todo era abajo ruido, movimiento,
2044     28|             con estrépito; su alegría era comunicativa y simpática.
2045     28|           reportase, que mirase quién era ella. «Bastante lo miraba,
2046     28|               instante ni en que ella era casada, ni en que había
2047     28|             abismo de flores. Aquello era caer, sí, pero caer al cielo.~ ~
2048     28|     conciencia, fuera de lo presente, era para comparar las delicias
2049     28|             estaba pasando ahora ella era pasiva, no había esfuerzo,
2050     28|          libertino vulgar, necio, que era lo que el vulgo estúpido
2051     28|   perfectamente manejar este resorte: era él capaz de despreciar,
2052     28|          oponía a sus pasiones. «Todo era preocupación, pequeñez de
2053     28|             contra él... Al fin, ¿qué era él? Un hombre que hablaba
2054     28|              de amor a una señora que era de otro ante los hombres...
2055     28|          sitio de sus entrañas que no era el vientre ni el corazón,
2056     28|               el medio. Sí, el placer era puramente material, pero
2057     28|               que afinaban más que él era su delicia por aquella temporada,
2058     28|               del alma.~ ~ Don Víctor era más soñador que ninguno
2059     28|             noble ex-regente. Ya todo era silencio en la casa, todos
2060     28|          perder del todo a su Regenta era idea que le asustaba, dando
2061     28|          curia eclesiástica. Cada vez era su poder mayor y más cruel
2062     28|              vida Quintanar! Su mujer era una joya; la más hermosa
2063     28|             celos de Mesía. Quintanar era feliz; quería que lo fueran
2064     28|             prisa. «Aquella casada no era como otras; había que conquistarla
2065     28|               una virgen; en rigor él era su primer amor y los ataques
2066     28|           sonrisa y todo lo demás que era mudo y no era deshonesto
2067     28|               demás que era mudo y no era deshonesto y grosero».~ ~ «
2068     28|                    Y en tanto la vida era una delicia. El maduro don
2069     28|              Regenta cayendo, cayendo era feliz; sentía el mareo de
2070     28|              para ellas. Toda la vida era diversión, excursiones,
2071     28|              al Vivero.~ ~ La alegría era extremada, nerviosa. Aquellos
2072     28|              sabían que todo el mundo era patria: «¡pero como allí!»
2073     28|        prolongó la fiesta en Vetusta; era la despedida del buen tiempo;
2074     28|              se inauguró en este día; era grande, alta, confortable,
2075     28|          violentas y amaneradas. Todo era allí ausencia de honestidad;
2076     28|               algazara. Lo demás todo era silencio. Volvió al salón.
2077     28|            ningún cuerpo humano. Todo era sillas y butacas. Sobre
2078     28|               en sus corazonadas, que era toda su religión, Álvaro
2079     29|               veces quien se marchaba era él.~ ~ -Ahora podremos hablar.~ ~ -
2080     29|             loco de su alma. ¡Aquello era lo peor!~ ~ -Pero... no
2081     29|         servir a los huéspedes. Petra era que ni pintada para el caso;
2082     29|           secreto.~ ~ -Ya ves como no era lo que tú temías, aprensiva...
2083     29|             mejor de la vida, no sólo era un maníaco, un hombre frío
2084     29|             cómo habían de ser celos? Era asco; y una especie de remordimiento
2085     29|             la vida. Sí, la vida, que era la juventud».~ ~ «Álvaro -
2086     29|              de puro prosaico y bajo, era repugnante, pero ¿qué remedio?
2087     29|             él reconocía que lo mejor era callar, dejarse adorar por
2088     29|          dentro. Y lo que él temía no era la enfermedad por la enfermedad,
2089     29|               vejez por la vejez; no; era buen soldado del amor, héroe
2090     29|              de batalla. Su inquietud era por otro motivo. Morir,
2091     29|            decaer en presencia de Ana era horroroso; era ridículo
2092     29|       presencia de Ana era horroroso; era ridículo y era infame. Sí;
2093     29|             horroroso; era ridículo y era infame. Sí; él faltaba a
2094     29|               voluptuosa intimidad no era posible conseguirlo, si
2095     29|            mismo Álvaro confesaba que era difícil encontrar semejante
2096     29|             el caserón de los Ozores. Era lo más seguro, lo más tranquilo,
2097     29|          criada, a la doncella mejor, era todo, si no imposible, muy
2098     29|               y comprendió además que era muy nueva la Regenta en
2099     29|             marido.~ ~ Pero otra cosa era conquistar a la criada sin
2100     29|            que lo supiera el ama. ¿No era Petra muy tentada de la
2101     29|              noticia ¿no probaban que era muy fácil interesar en su
2102     29|               podía ser manirroto: no era Petra enemiga del vil metal,
2103     29|                como ella sabía decir, era floja pasión en su alma,
2104     29|             que la casa del Magistral era el camino más seguro para
2105     29|             Pedro creía ella que todo era cuestión de semanas, de
2106     29|       reconocerlo la orgullosa rubia. Era el caso que, en su opinión,
2107     29|              su opinión, el Magistral era amante de doña Ana hacía
2108     29|             valerse de ella.~ ~ Petra era feliz en aquella vida de
2109     29|              quien servía con lealtad era a Mesía; éste pagaba en
2110     29|           éste pagaba en amor, aunque era algo remiso para el pago,
2111     29|         cuanto podía, porque ayudarle era satisfacer los propios deseos;
2112     29|              en engañar a la Regenta. Era, según él, muy justo respetar
2113     29|     encubridora a Petra; pero también era equitativo que él, sin decírselo
2114     29|           circunstancias. La cuestión era entrar todas las noches
2115     29|             de andar llaves en el ajo era delicado y podía comprometerla.
2116     29|               comprometerla. Lo mejor era que el señorito saltase
2117     29|               la barandilla de hierro era cosa fácil para tan buen
2118     29|              Para lo que servía Petra era para vigilar, para evitar
2119     29|               lo que Ana creía. Petra era la encargada de despertar
2120     29|            llegó a comprender Ana que era imposible, y tal vez ridículo,
2121     29|             el ánimo de Fermín, Petra era la persona destinada a sustituir
2122     29|              del Magistral. Para esto era preciso echar a rodar todo
2123     29|              de don Víctor, que, como era natural, querría vengarse,
2124     29|               un beso en la nuca.~ ~ «Era el otro; ¡pobre, no sabía
2125     29|            más, el cambio de amos. No era cierto que hubiese vacante
2126     29|        vacante en la fonda, pero allí era él amo y se crearía la vacante.
2127     29|             principalmente político y era seductor de oficio, ofreció
2128     29|             con amor, porque cada día era más urgente economizarlo;
2129     29|               sabía contenerse cuando era por su bien, se reprimió,
2130     29|              podía decir todavía cuál era. Por lo demás, tan amigos,
2131     29|               la tenía, porque la ley era ley; y en lo tocante a callar,
2132     29|          chocho, inútil y chiflao que era una compasión.~ ~ Petra
2133     29|            confesión, que no sabía si era una buena obra o un pecado
2134     29|             Dios, que al fin religión era también el interés del prójimo,
2135     29|        ciertas sospechas, pero, ¡ay!, era verdad, era verdad... Aquel
2136     29|               pero, ¡ay!, era verdad, era verdad... Aquel infame había
2137     29|    desgraciado, tan miserable, que él era en el mundo lo único digno
2138     29|               cristal helado. «Sí, él era como un eunuco enamorado,
2139     29|             Su mujer, la Regenta, que era su mujer, su legítima mujer,
2140     29|           abnegación, virtud a lo que era suplicio injusto, bárbaro,
2141     29|      desesperada; y para aquello, que era mucho peor que morirse,
2142     29|                para hacer daño? Aquél era el único que tenía».~ ~
2143     29|               sí, el asesino; la otra era su instrumento, el asesino
2144     29|              próximamente. Algo tarde era para comenzar la persecución
2145     29|              Quintanar al cenador que era el lugar de cita... ¡Cosa
2146     29|           siete menos cuarto, aquello era el crepúsculo matutino,
2147     29|             que le impedían saber qué era aquello, y al fin vio que
2148     29|              de tierra.~ ~ «El balcón era el de Anita».~ ~ El hombre
2149     29|            reflexionar, tiempo había, era tiro seguro; cuando el otro
2150     29|             el otro iba a morir».~ ~ «Era Álvaro, ¡y no iba a durar
2151     29|               don Víctor cuando ya no era tiempo; y como si le remordiera
2152     29|              no había reparado lo que era: ¡una escala! Aquello le
2153     29|             Magistral... todo aquello era otra escala y él no la había
2154     29|              ya iba; estaba resuelto, era claro, había que matar, ¿
2155     29|               delito... porque al fin era delito... Ellos eran unos
2156     29|          había llegado la suya. Aquél era su drama de capa y espada.
2157     29|               en el teatro? ¡Qué malo era el hombre! ¿Por qué recrearse
2158     29|          anciano y pensó en que ya lo era. Jamás se le había ocurrido
2159     29|             del espíritu.~ ~ «Ay, sí, era un pobre viejo; un pobre
2160     29|              ahora veía que su cariño era más hondo de lo que él mismo
2161     29|              claramente sentía que no era aquel amor de amante, amor
2162     29|             de la costumbre... Su Ana era como su hija... Y él sentía
2163     29|           quería vengarse, pero matar era mucho. No, no tendría valor
2164     29|        comprendía todo lo ingrata que era ella, pero no la aborrecía;
2165     29|            espada lo mataría; aquello era más noble, más digno de
2166     29|               las ideas del honor; él era al fin un marido burlado...
2167     29|       mandaría a desafiar al otro, si era esto lo que procedía. Por
2168     29|   descubrimiento que debía a Petra no era para revelado sin su cuenta
2169     29|         parecía otro... «¿Qué hacía? ¿Era un cobarde aplazando su
2170     29|             todo... «Frígilis, aunque era un soñador, llegado el caso
2171     29|           callar. Para hablar siempre era tiempo.~ ~ La mañana seguía
2172     29|             Vetusta ni de su paisaje. Era otro panorama; estaban a
2173     29|            que parecía un pordiosero. Era joven; más joven que la
2174     29|               la falda de la loma que era como primer escalón para
2175     29|            Álvaro.~ ~ «Sí, aquel tiro era el de Álvaro; los tordos,
2176     29|            único? No se lo abrió. «No era tiempo».~ ~ Para perseguir
2177     29|           pesar de todo, ¡qué hermosa era la naturaleza! ¡Qué tranquilamente
2178     29|              de montes y montes, ¿qué era comparada con el ancho mundo?
2179     29|              del monte Areo. «Vegetar era mucho mejor que vivir».~ ~
2180     29|      desconocida.~ ~ «Sí, la tristeza era universal; todo el mundo
2181     29|              universal; todo el mundo era podredumbre; el ser humano,
2182     29|            como bellacas; el mundo no era lo que ellas decían: al
2183     30|          debía comprender que aquello era demasiado...»~ ~ Y además,
2184     30|              que de alegría, mejor si era dolorosa, podía matarla
2185     30|              divinas y humanas, no lo era tanto en concepto de Frígilis
2186     30|               cita, si la tenía, como era de suponer. Pensaba Crespo
2187     30|    sorprenderle Quintanar, y entonces era imposible evitar una tragedia.
2188     30|               el patio cuando la casa era honrada y el jefe de familia
2189     30|              quitaba el sombrero, que era de teja.~ ~ -¡Mi señor don
2190     30|               El temblor de Quintanar era ya visible. «¿Qué iba a
2191     30|            Qué sabía don Víctor? Ésta era la cuestión..., según lo
2192     30|          debía hablar...; pero no, no era esto..., había que comenzar
2193     30|       enredaba entre las piernas, que era un sarcasmo de la suerte,
2194     30|         colgado al cuello.~ ~ «Él, él era el marido -pensaba -, y
2195     30|            había matado a nadie (y ya era mediodía) y que debía de
2196     30|              y no tenía el derecho... Era un clérigo, un canónigo,
2197     30|              entre las almohadas... Y era lo que debía hacer; si no
2198     30|           debía hacer; si no lo hacía era un cobarde; temía a su madre,
2199     30|             sin grandes aventuras..., era un cobarde: un hombre de
2200     30|            olvidé que su carne divina era carne humana; tuve miedo
2201     30|          sentó, escribió dos pliegos. Era una carta a la Regenta.
2202     30|               la causa de aquel amor: era la impura lascivia, se había
2203     30|             por...», y al llegar aquí era cuando, furioso contra sí
2204     30|          mujer lo mereciera todo. No, era más noble sacar de una vaina
2205     30|             por otro lado; y entonces era él mismo quien aparecía
2206     30|              lo primero; que lo demás era mentira, cosa de niños,
2207     30|              conversación inútil; que era lo único real, lo único
2208     30|          puedo ser: sí, Anita, sí, yo era un hombre, ¿no lo sabías? ¿
2209     30|               de doña Paula. «Su hijo era lo mejor del mundo. Era
2210     30|               era lo mejor del mundo. Era pecado enamorarse de él,
2211     30|              enamorarse de él, porque era clérigo; pero mayor pecado
2212     30|            clérigo; pero mayor pecado era engañarle, clavarle aquellas
2213     30|              que más temía doña Paula era que el Magistral no pudiera
2214     30|       barbilindo agostado; este medio era divulgar el crimen, propalar
2215     30|           miró al espejo. «Aquello ya era un hombre». La Regenta nunca
2216     30|               Podía salir de casa, ya era de noche, noche cerrada,
2217     30|            una armadura. «Sí, aquélla era su loriga; aquéllos, sus
2218     30|            claro. Ya sabía qué camino era el suyo.~ ~ -¿Una persona...
2219     30|           palacio de los Ozores. Esto era lo peor, después de la desgracia
2220     30|             la desgracia en sí misma. Era lo peor porque el Magistral,
2221     30|            que llama el mundo decoro, era necesario, según las leyes
2222     30|               le matase si posible le era, o si le cogía in fraganti
2223     30|             los esfuerzos anteriores, era otro el Magistral, se volvía
2224     30|           santo varón no sabía lo que era un ultraje de aquella especie;
2225     30|             otro mundo... «¡Qué fácil era asesinar con una palabra
2226     30|       pobrecita enferma, que acaso no era responsable de su delito!
2227     30|          pronto».~ ~ Pidió el , que era su cena los días de caza
2228     30|          honra si volvía.~ ~ La noche era obscura; el frío, intenso.
2229     30|              La verdad es que aquello era un escándalo.~ ~ Joaquín
2230     30|                 Un desafío en Vetusta era un acontecimiento de los
2231     30|             muchos años atrás, cuando era muy joven; había sido padrino
2232     30|               había pasado allí, pero era lo cierto que ni Mesía ni
2233     30|            Media.~ ~ Orgaz padre, que era algo erudito, aunque de
2234     30|       escribano, aseguró que el duelo era resto de las ordalías.~ ~
2235     30|         explicarle a don Frutos quién era Fígaro; pero aún después
2236     30|        padrinos, amén de Frígilis.~ ~ Era verdad. Por más que Crespo
2237     30|      transparentarse su secreto. Ello era que en todo Vetusta no se
2238     30|              y no se sabía nada.~ ~ -¿Era una papa lo del duelo? -
2239     30|             el Marquesito.~ ~ -No, no era broma; la cosa iba de veras.
2240     30|                 Nada, que Mesía, como era natural, se opuso; dijo
2241     30|              Lo que no le había dicho era que él tenía mucho miedo;
2242     30|           aceptó inmediatamente.~ ~ «¡Era natural!, debía huir, ¿con
2243     30|          presenció el lance. El duelo era a sable, en el Montico,
2244     30|               se empeñaba en batirse; era aragonés y no cejaría.~ ~ «
2245     30|               Según el ex-magistrado, era un buen padrino. Error,
2246     30|               las piernas. El otro no era probable que le hiriese
2247     30|               No importaba; la verdad era que del furor que en su
2248     30|             ser muy breves. Lo cierto era que Fulgosio, el coronel,
2249     30|                Lo único original allí era que Fulgosio juraba que
2250     30|            primerizos, pues primerizo era también Mesía a pistola,
2251     30|           Bedoya pensó que don Víctor era buen tirador, pero no se
2252     30|             de tristeza, «¡qué amarga era la ironía de la suerte! ¡
2253     30|               Todo aquello de matarse era absurdo... Pero no había
2254     30|              había remedio. La prueba era que ya le llamaban, ya le
2255     30|         fuerza extraña en el corazón; era robusto, la sangre bulló
2256     30|              disparar iba a matarle; ¡era don Víctor, el gran cazador!»~ ~
2257     30|               bravo como cualquiera. ¡Era la corazonada! El pulso
2258     30|               la corazonada».~ ~ Ello era que don Víctor Quintanar
2259     30|             pasados debajo del agua, ¡era tan dulce ver el cielo azul,
2260     30|            Madrid, por ejemplo?» Todo era falso, frío, necio, en aquel
2261     30|         atormentaba el cerebro de Ana era el remordimiento mezclado
2262     30|             crimen. ¡Oh, qué evidente era el mal! Ella estaba condenada.
2263     30|           Ella estaba condenada. Esto era claro como la luz. Pero
2264     30|           todo, al remordimiento, que era una cosa sólida en la conciencia,
2265     30|             más que en su dolor.~ ~ Y era como un consuelo, como respirar
2266     30|            aun repugnándole sentirla, era nuevo remordimiento.~ ~
2267     30|            que su razón acataba. Esto era horrible, pero al fin era
2268     30|             era horrible, pero al fin era vivir en tierra firme, no
2269     30|             de terremoto interior que era lo peor que podía traer
2270     30|          principal deber por entonces era librarse del peligro de
2271     30|              aquel gran escándalo que era como una novela, algo que
2272     30|            alegraban de lo ocurrido. ¡Era un escándalo! ¡Un adulterio
2273     30|           presentar en público? ¡Como era tan romántica! Hasta una
2274     30|             amistad tan íntima...~ ~ -Era escandalosa.~ ~ -Aquello
2275     30|              escandalosa.~ ~ -Aquello era...~ ~ -¡Nauseabundo!~ ~
2276     30|              Toda Vetusta sabía quién era Obdulia..., pero ella no
2277     30|                  Sí, sí, el escándalo era lo peor; aquel duelo funesto
2278     30|           aquel duelo funesto también era una complicación. Mesía
2279     30|               sus desgracias; el caso era no discurrir. Y a ratos
2280     30|           dejar pasar las horas, esto era algo, tal vez lo mejor.
2281     30|               asustaba; lo que quería era morir sin desvanecerse en
2282     30|              de la Almunia. «Bastante era. El caserón era de Ana legalmente
2283     30|              Bastante era. El caserón era de Ana legalmente y moralmente».~ ~
2284     30|           primera paga de viuda.~ ~ Y era tal la necesidad, tan imposible
2285     30|           gato que ellos.~ ~ Frígilis era el amigo constante, el compañero
2286     30|            aquel misticismo falso que era su vergüenza. «La visión
2287     30|            los ojos. ¡Pero qué triste era lo que la decía el templo
2288     30|            aquel cariño del sacerdote era amor brutal, amor como el
2289     30|             el infame, cuando tal vez era puro afecto que ella no
2290     30|             Volver a aquella amistad ¿era un sueño? El impulso que
2291     30|        arrojado dentro de la capilla ¿era voz de lo alto o capricho
2292     30|        maldita enfermedad que a veces era lo más íntimo de su deseo
2293     30|            somnolencia espiritual que era peor que el infierno; creyó
2294     30|               alma, y si el perdón no era posible, pedir la penitencia
2295     30|               del confesonario.~ ~ Ya era tarde. La catedral estaba


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