Cap.

 1      1|         años hacía que no perdía baile, ni reunión de confianza,
 2      6|         Generalmente el salón de baile se enseñaba a los forasteros
 3      6|          partida. En el salón de baile, donde no se permitía jugar
 4      6|          Orgaz hijo suspendió el baile, que había emprendido mientras
 5      8| americano. ¿Te acuerdas de aquel baile fantástico que bailaban
 6     19|        por el salón largo, el de baile, oscuro, triste, resonante
 7     20|         una columna y comenzó un baile flamenco con perfección
 8     23|     Señor, llamémoslo así, en un baile de candil... en una orgía...
 9     24|           tendremos que ir a ese baile dichoso. No hay que enfadarle.
10     24|              Y es de etiqueta el baile?~ ~ -Creo... que sí...~ ~ -¿
11     24|      vestido que he de llevar al baile.~ ~ -¿Cómo puede ser eso...?~ ~ -
12     24|     aunque no de que fuéramos al baile. El vestido, según pudo
13     24|              Y la Regenta fue al baile del casino, porque como
14     24|         asistir de jaquet) diese baile, pero jamás de trajes, el
15     24|  resistencia? ¿A qué iba ella al baile? Por obedecer a su marido,
16     24|         atormentarse más.~ ~ «El baile y ella, ¿qué tenían que
17     24|          en que Ana asistiera al baile y a la cena, «que tendría
18     24|        Montecristo.~ ~ Y como el baile era de etiqueta, la más
19     24|        rincón de su amiga.~ ~ El baile se animaba, la maledicencia
20     24|       ambiente, se entregaban al baile con furor invencible, como
21     24|          pensaba en la reina del baile, en el mejor traje, en las
22     24|      salón, en un intermedio del baile. Visita iba a su lado callada,
23     24|    arrogante figura; allí, en el baile, debajo de aquella araña
24     24|         cualquier otro sitio. El baile animado, ardiendo de voluptuosidad
25     24|        Le zumbaron los oídos, el baile se transformó de repente
26     24|      seducción de una cena en un baile, que para los demás era
27     24|     Trabuco era el paraíso aquel baile que él llamó clandestino,
28     24|         tomaban, se empezó aquel baile improvisado.~ ~ Don Víctor
29     24|          general. Se suspende el baile clandestino, don Víctor
30     24|       viene el señorito...! ¿Del baile, eh?~ ~ -Señor Roque, del
31     24|         eh?~ ~ -Señor Roque, del baile...~ ~ Y al acostarse, al
32     25|         que había sucedido en el baile. «La aristocracia se había
33     25|         ayer..., lo de hoy... El baile, la cena; ¿qué es esto,
34     25|           qué es esto...?~ -¡Qué baile!, ¡qué cena!, no es eso...
35     25|       los recuerdos confusos del baile... Creyó que volvía a caer
36     25|        que su mujer había ido al baile: se había acabado el Paraguay,
37     25|             Ayer me hizo daño el baile..., no quiero más..., no
38     25|         punzante el recuerdo del baile, sobre todo el del contacto
39     28|           pero el torbellino del baile, las emociones fuertes del
40     28|          la polka de Salacia, un baile fantástico de gran espectáculo