Cap.

 1      1|      Saturno, hubo un silencio solemne. El sabio había tosido,
 2      2|         El suceso era bastante solemne y había de sonar lo suficiente
 3      4|      puerto, más pacífico, más solemne; desde allí las olas no
 4      8|    señoras -dijo Pedro con voz solemne.~ ~ Porque el mandato de
 5      8|    silencio era el que llamaba solemne y aristocrático don Saturnino.~ ~
 6     11|        moda del rey que rabió: solemne, pulcro, eso sí; ¡pero qué
 7     11|         Confirmábase al fin de solemne modo la doctrina del cuarto
 8     11|  gracia, espiritual, no flaca, solemne, hierática, todo estaba
 9     12|     honrar con su presencia el solemne reparto de premios a la
10     12|       Obispo que presidiera el solemne reparto de premios aquel
11     12|    palabra de honor de ir a la solemne sesión de La Libre Hermandad.
12     12|   estrechas, su triste soledad solemne, su hierba entre los guijarros,
13     13| Ripamilán y Anita, con palabra solemne de dejarle en el Espolón,
14     14|      momento; hubo un silencio solemne y en medio de él sonó claro,
15     15|       segundo trueno.~ ~ Pausa solemne. Doña Paula volvió a sentarse
16     18|  frente de Ana.~ ~ Fue un beso solemne, apretado, pero frío...
17     20|  temblorosa -, si un juramento solemne no me obligara a permanecer
18     20|        no puedo romper un voto solemne, un juramento... y no iré
19     20|              Eso, el juramento solemne de no poner en mi vida allí
20     22|        rezaba delante, con voz solemne, al terminar cada oración.~ ~
21     23|    guardia, caminaban con paso solemne acólitos con sendas hachas
22     24|   entrar en los salones en día solemne era para él semejante a
23     25|        el estribillo monótono, solemne, de varias canciones que
24     25|        devoto; siguió silencio solemne; después hubo toses, estrépito
25     26|        toda Vetusta en ocasión solemne que la Regenta era sierva
26     26|        Su conversión debía ser solemne, para escarmiento de pícaros
27     26|       aquella prueba pública y solemne de su adhesión a él, al
28     26|         lo decían con silencio solemne...» y Ana sudaba de congoja... «¡
29     26|  disfrazaba de nazareno en tan solemne día, según costumbre inveterada,
30     26|     que sólo se calzaba en tan solemne día.~ ~ «¡Ya llegan, ya
31     26|       amigo, y exclamó con voz solemne y de sollozo:~ ~ -¡Lo juro
32     27|        faltará usted. Sería un solemne desaire».~ ~ «No, no faltaré -
33     30|  último lo dijo Crespo con voz solemne, grave, vibrante que hizo
34     30|        de repente y con ademán solemne, como sacerdote de ópera,