Cap.

 1      1|     correr hacia el Norte. En las calles no había más ruido que el
 2      1|           surgido. Casi todas las calles de la Encimada eran estrechas,
 3      1|     terreno perdido, volvía a las calles anchas y respiraba con delicia
 4      7|        hora, empleado en recorrer calles y plazuelas, don Álvaro
 5      8|          alineado. Soñaba con las calles de Nueva York -que nunca
 6      9|     entraban por una de las pocas calles nuevas de Vetusta, de casas
 7     10|    chispas por las mal empedradas calles de la Encimada; llegaba
 8     11|      Vetusta; en el paseo, en las calles, en el Casino, hasta en
 9     11|       estrechas y gastadas de las calles tortuosas y poco concurridas
10     12| peligrosos que en Vetusta: correr calles, ver mucha gente desconocida,
11     12|   Catecismo, que cantaban por las calles en vez de coplas profanas
12     12|        catedral... huyó hacia las calles anchas, dejó la Encimada
13     13|           sus resonancias por las calles solitarias de la Encimada,
14     13|     anterior, en el paseo por las calles y en tantas citas implícitas,
15     13|     guijarros puntiagudos por las calles estrechas de la Encimada.
16     14|     buenos! -iba pensando por las calles -. Era enemigo de dar nombres
17     14|        Magistral por las primeras calles de la Encimada, pasó por
18     14|      Vivero, después de dejar las calles torcidas de la Encimada,
19     16|         silencio de muerte de las calles y contra el ruido necio
20     16|       sucias y estrechas plazas y calles tendrían, como ahora, aspecto
21     18|     piedra y madera carcomida; de calles estrechas, cubiertas de
22     20|  trasnochadores retumbaban en las calles de la Encimada como si anduvieran
23     20|          un alma por allí, en las calles no hay más que perros y
24     21|      Vetusta, aquella tristeza de calles y paseos no les disgustaba».
25     22|      cabildo, cofradías, casinos, calles y paseos cuando los del
26     22|       tejados y a lo largo de las calles de Vetusta. La mañana estaba
27     26|           No se respiraba por las calles del pueblo más que religión.~ ~ -¡
28     26|      pueblo entero, por todas las calles de Vetusta detrás de Jesús
29     26|      pisando el lodo de todas las calles de la Encimada, dándose
30     26|          corazón, se agolpaban en calles, plazas y balcones, a ver
31     30|           levantarse y salir. Las calles, las gentes brillaban a
32     30|  castigarlos? Había salido de las calles y había paseado en el paseo
33     30|         habría poca gente por las calles, nadie le reconocería con