Cap.

 1      1|      como en las mujeres de su edad se anuncian por asomos de
 2      1|        poco. No era viejo: «La edad de Nuestro Señor Jesucristo»,
 3      4|        y eso que en cada nueva edad le había añadido una parte.
 4      4|        lo está y mucho para su edad... -decía el hombre de doña
 5      4|       estaba muy lejos aquella edad; recordaba vagamente su
 6      4|        Aunque Ana llegaba a la edad en que la niña ya puede
 7      5| transformaciones propias de la edad; propias sí, pero delante
 8      5|       que a ella, por mayor en edad, le tocaba seguir explicando
 9      5|    nada; había sido cosa de la edad crítica que atravesaba entonces.
10      7|       de esta diferencia en la edad congeniaban, tenían los
11      9|   femenil en lo antiguo, en la Edad Media y en los tiempos modernos.
12     11|     usted, don Cayetano; ni la edad, ni el ser aragonés, le
13     11|      en Loreto... al llegar la edad... cosa de la sangre...
14     11|    místico y apasionado, de la Edad Media... y sueco? Él era
15     13|   desocupada, en la flor de la edad y sin amar. «Sí, este cura
16     14|   clérigos y no pocos legos de edad y respetabilidad, pero pocas
17     15|    hasta que los estudios y la edad de Fermín lo exigieron.
18     15|       comunión por razón de la edad, de la educación, de los
19     16|      sólidos edificios de otra edad; y admiraba no menos el
20     16|     desnuda». Comparar aquella Edad Media soñada -ella colocaba
21     16|       a don Juan Tenorio en la Edad Media por culpa de Perales -
22     16|   caseros (es decir, cuando mi edad y posición social me permitían
23     18|    Audiencia de Granada, a una edad en que todavía se sentía
24     20|    panza, no mucho, obra de la edad y la vida sedentaria; que
25     20|      todos echaban de menos la edad de las ilusiones, no por
26     20|         aun los jóvenes, en la edad triste en que el amor es
27     21| ambición noble, elevada, en la edad viril. Pero aquella ambición
28     29|      el amor propio a quien la edad empezaba a dar algunos disgustos?
29     29|     tristes, aprensiones de la edad, venían de tarde en tarde;
30     29|     burlaban de él. Llegaba la edad en que iba a necesitar una
31     29|      qué alegué derechos de mi edad para no servir como soldado
32     30|        habíamos heredado de la Edad Media.~ ~ Orgaz padre, que