Cap.

 1      1|   primitivo recinto de Vetusta. Comprendía lo que se llamaba el barrio
 2      1|     sueños. Con gran pesadumbre comprendía el devoto anticuario que
 3      5|        Era verdad, era hermosa. Comprendía aquellos ardores que con
 4      6|   antonomasia irónica que él no comprendía.~ ~ Pasó el tiempo; murió
 5      6|        se diera por vencido.~ ~ Comprendía que allí las discusiones
 6      7|      los libros y las comedias; comprendía que era ridículo buscarlo
 7      8|    Visita de una conquista más. Comprendía don Álvaro que Visitación
 8      9|         vulgares y frías.~ ~ No comprendía él todavía que aquello de
 9     11|         aquello le importaba ni comprendía, acaso era el único que
10     13| insípida, pero eficaz...~ ~ Ana comprendía perfectamente. «Quería decir
11     13|        al Vivero aquella tarde; comprendía que eran allí todos íntimos
12     15|        a que correspondía, pero comprendía que se hablaba de amor.
13     16|   ocasión le derretían; y Mesía comprendía y sentía lo que estaba pasando
14     18| resistencia de la de Ozores; no comprendía él que su ídolo, su don
15     19|         su olor, su sabor..., y comprendía que antes, en rigor, no
16     19|       alma de Ana, que entonces comprendía aquella adoración tranquila,
17     21|           Y además que nadie le comprendía. Frígilis era un estuco:
18     22|    gritó doña Petronila, que no comprendía por qué se había de tener
19     23|       Dios! ¡El Niño Dios! Ella comprendía ahora toda la grandeza de
20     23|      Provisor... Parecía que no comprendía sus palabras...~ ~ -Sí,
21     23|     como una fiera en la jaula; comprendía que en aquel momento diría
22     25|      que de Dios mismo... Ahora comprendía muchas cosas. Don Fermín
23     26|      mismo no se podía engañar. Comprendía que la resolución de Ana
24     28|       hecho muy poca gracia.~ ~ Comprendía don Fermín que su influencia
25     28|   explícito en este particular, comprendía lo que su amigo, nuevo hermano,
26     29|       tranquilo, lo más cómodo. Comprendía Álvaro los escrúpulos de
27     29|  llenado la boca de agua; Petra comprendía que la casa del Magistral
28     29|              Además, don Álvaro comprendía que ya no podía pagar a
29     29|      heladas; sentía la herida, comprendía todo lo ingrata que era
30     29|        pero no podía otra cosa. Comprendía que aquellas meditaciones
31     30|        sosa y hueca...! Pero ya comprendía él la causa de aquel amor:
32     30|         dominar a don Víctor, y comprendía, y disculpaba hasta cierto