Cap.

 1     11|            cántaro a la fuente... Don Fortunato es una malva, corriente;
 2     11|                estás perdido.~ ~ -Don Fortunato no se mueve sin orden mía.~ ~ -
 3     12|              El Ilustrísimo Señor don Fortunato Camoirán, Obispo de Vetusta,
 4     12| amonestaciones de don Fermín para que Fortunato se abstuviese de adornar
 5     12|               una delicia oírlos».~ ~ Fortunato era un santo alegre que
 6     12|               la madre.~ ~ La vida de Fortunato la ocupaban cuatro grandes
 7     12|                  Durante algunos años Fortunato había sido el predicador
 8     12|            almas. Sin pensar en ello, Fortunato poseía el arte supremo del
 9     12|               el mayor placer. Cuando Fortunato bajaba de la cátedra deseando
10     12|                Aquel mismo año en que Fortunato lo había hecho tan mal,
11     12|         cierto sermón de Semana Santa Fortunato estuviera sublime al describir
12     12|                Era Dios...!», gritaba Fortunato horrorizado, con las manos
13     12|         absurdo de maldad, los sintió Fortunato en aquel momento, con desconsuelo
14     12|           Vetusta.~ ~ Así era el buen Fortunato Camoirán, prelado de la
15     12|        correveidile de Glocester».~ ~ Fortunato ya había dado palabra de
16     12|            eterno que estaba haciendo Fortunato sin saberlo, irritaba al
17     12|           comprender todo el valor de Fortunato. ¡Qué poéticas, qué nobles,
18     14|           pruebas de una pastoral.~ ~ Fortunato levantó la cabeza y sonrió.~ ~ -
19     14|           servida por la Marquesa.~ ~ Fortunato leía las pruebas y seguía
20     14|        disimularlos.~ ~ -Yo -continuó Fortunato - les dije que no se apurasen;
21     15|               no había sido suya. Don Fortunato Camoirán no era capaz de
22     15|            tenía influencia. Cuando a Fortunato le ofrecieron el obispado
23     18|      enderezarle su Provisor. El buen Fortunato estaba en un apuro, no tenía
24     18|                pero pedía lo suyo.~ ~ Fortunato, temblorosa la voz, solicitaba
25     18|                por qué las pagaba él, Fortunato, de su bolsillo? Si sabía
26     18|              por qué se comprometíaFortunato confesó que parecía un subteniente
27     20|         actual obispo de Vetusta, don Fortunato Camoirán, era una persona
28     20|              pocos hacen un mucho. Si Fortunato sabe algo, cree algo, nos
29     22|              de liberales, y el mismo Fortunato, el Obispo, a quien tenía
30     22|                 Estaba pálido el buen Fortunato; le temblaba el labio inferior,
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