Cap.

 1      1|    cadenas de hierro. Pero si moría un obrero bueno, creyente,
 2      1|       vetustense, y en cuanto moría un aristócrata estaba de
 3      5|       manos llenas.~ ~ Ana se moría de vergüenza. Estos elogios
 4      7|       lo contó a mamá, que se moría de risa; la lugareña estaba
 5     10|    Pero no importaba; ella se moría de hastío. Tenía veintisiete
 6     15|      pedir una taza de . Se moría de sed, pero temía beber
 7     19|    fue que Anita creyó que se moría, y padeció aún más que en
 8     22|       el pobre don Santos, se moría sin remedio, según don Robustiano
 9     22|      pudo averiguar de qué se moría don Santos, pero a la media
10     22|   arruinado. Decían a una que moría de hambre y nadie al visitarle
11     22|  existía. «Y ahora don Santos moría escandalosamente, moría
12     22|       moría escandalosamente, moría como un perro, habría que
13     22|         Era mentira. Barinaga moría hablando, pero sin saber
14     22|       un perro faldero que se moría de viejo sin salir jamás
15     25|     la calle, sin conocer que moría desesperado. ¡Y no podía
16     25|        esta noche creí que me moría..., ayer..., hoy..., no
17     25|      traidora... Sí, creí que moría...~ ~ -¿Por mí, por culpa
18     25|  había figurado. Tenía celos, moría de celos... El Magistral
19     26|      aquel lecho de muerte se moría de envidia y estaba verde
20     26|  lenguas de la unción con que moría el ateo, a quien ahora todos
21     26|       flaco servicio si no se moría cuanto antes.~ ~ Murió.
22     26|  estaba pálida de emoción. Se moría de envidia. «¡El pueblo
23     30|    volviese aquella noche... ¡moría don Álvaro! Y que ardiera
24     30|           pero como volviera, moría». Así como poco antes había
25     30| tristes. «Aquella voluntad se moría -pensaba Crespo -; en otro
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License