IntraText Índice | Palabras: Alfabética - Frecuencia - Inverso - Longitud - Estadísticas | Ayuda | Biblioteca IntraText | Búsqueda |
Alfabética [« »] etc 7 eternidades 1 eterno 1 eugenio 34 europa 1 europeos 1 eva 1 | Frecuencia [« »] 35 así 34 aquí 34 d 34 eugenio 34 otra 34 puerta 34 sí | Pedro Antonio de Alarcón El sombrero de tres picos Concordancias eugenio |
Cap.
1 VIII| piernas y su joroba.~ ~ D. Eugenio de Zúñiga y Ponce de León ( 2 VIII| adelante.~ ~ Las medias de D. Eugenio (única parte que, además 3 XI| mujer!... -repitió Don Eugenio de Zúñiga y Ponce de León, 4 XI| Proterva! -balbuceó Don Eugenio de Zúñiga con la boca hecha 5 XII| el primer descuido de Don Eugenio, y díjole, en fin, a éste 6 XII| de suceder allí, que Don Eugenio de Zúñiga se puso lívido 7 XIV| tú, Garduña! -contestó D. Eugenio, suspirando lánguidamente.~ ~ -¡ 8 XIV| necesito consejos! -gritó D. Eugenio, acordándose de pronto de 9 XIV| caso!~ ~ -¡Basta! -gritó D. Eugenio - . ¡Eres un insolente!~ ~ 10 XX| Frasquita, firmado por D. Eugenio de Zúñiga y Ponce de León!~ ~ -¡ 11 XX| propia manera que solía D. Eugenio de Zúñiga, y diciéndose 12 XXII| fue la primera frase de D. Eugenio.~ ~ -¿Quién?~ ~ -¡El demonio!... 13 XXII| preguntole entonces a D. Eugenio, levantando en alto el velón 14 XXII| a la Ciudad? -exclamó D. Eugenio más aterrado que nunca.~ ~ - 15 XXVII| Alguacil del Lugar por D. Eugenio de Zúñiga, le decía a la 16 XXVII| Corregidor! -gritó al fin Don Eugenio, sintiendo que la pezuña 17 XXVII| a la cárcel! -exclamó D. Eugenio de Zúñiga - . ¡Todo el mundo 18 XXVII| desgraciado? -prorrumpió D. Eugenio de Zúñiga - . ¿Crees tú 19 XXVIII| Yo! -respondió D. Eugenio de Zúñiga - . ¡Abrid!~ ~ 20 XXVIII| paliza que le costaba a D. Eugenio su aventura de aquella noche, 21 XXIX| Mi mujer! -tartamudeó D. Eugenio.~ ~ -Que pasen esos rústicos... 22 XXXI| señora... ¡A V.! -replicó D. Eugenio - . ¡Las mujeres son depositarias 23 XXXI| Levantándose! -bramó D. Eugenio.~ ~ -¿Se asombra V.? ¿Pues 24 XXXI| todo el mundo! -gritó D. Eugenio, echando espumarajos de 25 XXXI| Supongamos que V. es D. Eugenio de Zúñiga y Ponce de León...~ ~ -¡ 26 XXXII| boca sumida, como solía D. Eugenio de Zúñiga.~ ~ En seguida 27 XXXII| contener una carcajada.~ ~ D. Eugenio sintió aquel nuevo agravio, 28 XXXII| prorrumpió al fin Don Eugenio, sintiéndose ablandado por 29 XXXIII| no dijese por último a D. Eugenio:~ ~ -¡Mira, cállate tú ahora! 30 XXXIII| díjole el murciano a D. Eugenio, alegrándose mucho de no 31 XXXV| entró diciendo el insigne D. Eugenio de Zúñiga.~ ~ Y, después 32 XXXV| Frasquita y sin hacer caso de D. Eugenio - . Pues vaya V. descuidada, 33 XXXV| solo ministro obedeció a D. Eugenio. Todos miraban a la Corregidora.~ ~ -¡ 34 XXXV| estas palabras, que Don Eugenio oyó sin pestañear (pues