Cap.

 1    Ded|      Dedicatoria~ ~Al señor~ ~D. JOSÉ SALVADOR DE SALVADOR~ ~
 2    Pre|     Romancero del inolvidable D. Agustín Durán.~ ~ El fondo
 3      V|    ojos del Académico, por un D. Francisco de Quevedo en
 4   VIII|       piernas y su joroba.~ ~ D. Eugenio de Zúñiga y Ponce
 5   VIII|    adelante.~ ~ Las medias de D. Eugenio (única parte que,
 6      X|            Vamos! ¡Vamos! Sr. D. Lucas... ¡No tenga V. tantos
 7    XIV|   como tú, Garduña! -contestó D. Eugenio, suspirando lánguidamente.~ ~ -¡
 8    XIV|     necesito consejos! -gritó D. Eugenio, acordándose de
 9    XIV|      caso!~ ~ -¡Basta! -gritó D. Eugenio - . ¡Eres un insolente!~ ~
10     XV|      el Rey Nuestro Señor (Q. D. G.), prevengo a Lucas Fernández,
11    XIX|       un malhechor pagado por D. Engenio, y salió a escape
12     XX|   señá Frasquita, firmado por D. Eugenio de Zúñiga y Ponce
13     XX|       propia manera que solía D. Eugenio de Zúñiga, y diciéndose
14   XXII|       fue la primera frase de D. Eugenio.~ ~ -¿Quién?~ ~ -¡
15   XXII|         preguntole entonces a D. Eugenio, levantando en
16   XXII|     ido a la Ciudad? -exclamó D. Eugenio más aterrado que
17   XXIV|     Sevilla, a quien llamaban D. Pedro el Cruel. ¡A ver,
18  XXVII|     al Alguacil del Lugar por D. Eugenio de Zúñiga, le decía
19  XXVII|   mundo a la cárcel! -exclamó D. Eugenio de Zúñiga - . ¡
20  XXVII|      desgraciado? -prorrumpió D. Eugenio de Zúñiga - . ¿
21 XXVIII|  Garduña.~ ~ -¡Yo! -respondió D. Eugenio de Zúñiga - . ¡
22 XXVIII|       paliza que le costaba a D. Eugenio su aventura de
23   XXIX|         Mi mujer! -tartamudeó D. Eugenio.~ ~ -Que pasen
24   XXXI|     señora... ¡A V.! -replicó D. Eugenio - . ¡Las mujeres
25   XXXI|          Levantándose! -bramó D. Eugenio.~ ~ -¿Se asombra
26   XXXI|    aquí todo el mundo! -gritó D. Eugenio, echando espumarajos
27   XXXI|          Supongamos que V. es D. Eugenio de Zúñiga y Ponce
28  XXXII|       boca sumida, como solía D. Eugenio de Zúñiga.~ ~ En
29  XXXII|    contener una carcajada.~ ~ D. Eugenio sintió aquel nuevo
30 XXXIII|        no dijese por último a D. Eugenio:~ ~ -¡Mira, cállate
31 XXXIII|          díjole el murciano a D. Eugenio, alegrándose mucho
32   XXXV|     entró diciendo el insigne D. Eugenio de Zúñiga.~ ~ Y,
33   XXXV| Frasquita y sin hacer caso de D. Eugenio - . Pues vaya V.
34   XXXV|      solo ministro obedeció a D. Eugenio. Todos miraban