Cap.

 1      I|            esta envejecida Parte del mundo desde 1789.~ ~ Ni paraba
 2      I|           que entonces sucedía en el mundo, ha sido venir a parar a
 3    III|         fuerza de agasajar a todo el mundo.~ ~ -«Vuestra Merced me
 4     IV|           soldado, más ganoso de ver mundo y correr aventuras que de
 5      V|      agradables habrá echado Dios al mundo. Prendado de su viveza,
 6     VI| considerábase la mujer más feliz del mundo al verse adorada por él.
 7      X|         Cosas más raras se ven en el mundo!~ ~ -Tampoco me daría gran
 8      X|           todos los Corregidores del mundo? ¿No eres tú mi Frasquita?~ ~ -¡
 9    XIV|           autoridad!... ¡Así anda el mundo!~ ~ -¡Te he dicho que calles! ¡
10    XIX|             hay algo imposible en el mundo? ¿No se casó conmigo, siendo
11    XIX|           modo:~ ~ -¡Qué noche! ¡Qué mundo! ¡Qué vida la mía desde
12     XX|         espíritu y haciéndole ver el mundo como una región extraña
13     XX|             No me convienes! Todo el mundo tendría lástima de ellos..., ¡
14    XXI|            ir a Madrid, y al fin del mundo, a pedir justicia contra
15    XXI|              yo debo escandalizar el mundo antes de comprometer mi
16  XXVII|             derribados.~ ~ -¡Todo el mundo a la cárcel! -exclamó D.
17  XXVII|       Eugenio de Zúñiga - . ¡Todo el mundo a la horca!~ ~ -Pero, señor... -
18   XXXI|                Fuera de aquí todo el mundo! -gritó D. Eugenio, echando
19 XXXIII|             ahorcarte a ti y a medio mundo, si no me satisfacen las
20   XXXV|              y despidiendo a todo el mundo con la mayor finura; es
21  XXXVI|              la previsión de todo el mundo, entraron en España los
22  XXXVI|            copa que ya usaba todo el mundo pudiesen hacerles olvidar
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