Parte. Capítulo

 1      I.    19|      alguna han sido pena del pecado cometido por vuestra merced
 2      I.    22|       lo haya cada uno con su pecado; Dios hay en el cielo, que
 3      I.    30|       lo que hacía, y que era pecado darles libertad, porque
 4      I.    30|      tú que suele decirse: «A pecado nuevo, penitencia nueva.»~ ~
 5      I.    33|      mesmo, por ver que había pecado:~ ~ ~ ~Que a un magnánimo
 6      I.    34|       no está aún cometido el pecado sino con pensamiento, y
 7      I.    36|    como en ello no intervenga pecado, no debe de ser culpado
 8      I.    40| apartado, por su ignorancia y pecado. Con tantas lágrimas y con
 9      I.    45|        ni os dé a entender el pecado e ignorancia en que estáis
10      I.    49|     de los Reyes, confieso mi pecado; que soy tan ignorante,
11      I.    51|   atribuyeron a ignorancia su pecado, sino a su desenvoltura
12      I.    51|       dicho, antes se supo su pecado que su deseo. No hay hueco
13     II.    Pr|    pensamiento: castíguele su pecado, con su pan se lo coma y
14     II.     1|     tierra, que por solo este pecado que hoy comete Sevilla en
15     II.    13|   ruego yo a Dios me saque de pecado mortal, que lo mesmo será
16     II.    32|    sin tener conocimiento del pecado que se reprehende, llamar
17     II.    33|     me comen~ ~ ~ ~Por do más pecado había;~ ~ ~ ~y según esto,
18     II.    46| empedernido caballero, por el pecado de tu dureza y pertinacia;
19     II.    58|  llevo.~ ~ -Dios lo oiga y el pecado sea sordo -dijo Sancho a
20     II.    58|       lleno el infierno. Este pecado, en cuanto me ha sido posible,
21     II.    60|      abismo llama a otro y un pecado a otro pecado, hanse eslabonado
22     II.    60|       otro y un pecado a otro pecado, hanse eslabonado las venganzas
23     II.    65|    oiga -dijo Sancho - , y el pecado sea sordo; que siempre he
24     II.    67| quitada la causa, se quita el pecado; y ojos que no veen, corazón
25     II.    68|    esta afrenta es pena de mi pecado, y justo castigo del cielo