Parte. Capítulo

 1      I.     4|           cosa por nosotros jamás vista ni oída, y más siendo tan
 2      I.    13|      nieve, y las partes que a la vista humana encubrió la honestidad
 3      I.    14|            nunca alcanza~ ~ ~ ~mi vista a ver en sombra a la esperanza,~ ~ ~ ~
 4      I.    14|            que algunas alegran la vista y no rinden la voluntad;
 5      I.    14|           que he enamorado con la vista he desengañado con las palabras;
 6      I.    15|        manera, que me quitaron la vista de los ojos y la fuerza
 7      I.    16|         merced como la que con la vista de vuestra gran fermosura
 8      I.    18|         día vendrá donde veas por vista de ojos cuán honrosa cosa
 9      I.    18|           les turbara y cegara la vista; pero, con todo esto, viendo
10      I.    18|           imaginación de su nunca vista locura, y, sin parar, prosiguió
11      I.    19|          mayores parecían; a cuya vista Sancho comenzó a temblar
12      I.    20|         Capítulo XX.~ De la jamás vista ni oída aventura que con
13      I.    20|        acometer ahora esta tan no vista y tan temerosa aventura,
14      I.    20|       cuanto podía el cuello y la vista, por entre las piernas de
15      I.    20| melanconía tanto con él, que a la vista de Sancho pudiese dejar
16      I.    21|       ropón ducal a cuestas, o me vista de oro y de perlas, a uso
17      I.    25|         rara, tan felice y tan no vista imitación. Loco soy, loco
18      I.    27|   permitas~ ~ ~ ~Que el engaño se vista tu librea,~ ~ ~ ~Con que
19      I.    28|         el sobresalto que nuestra vista os ha causado, y contadnos
20      I.    28|       pudiera compararse, sin ser vista, a mi parecer, de otra persona
21      I.    28|         me le hallé delante, cuya vista me turbó de manera que me
22      I.    29|   desterrarme para siempre de ser vista que no verles el rostro,
23      I.    29|       nueve años se podrá estar a vista de la gran laguna Meona,
24      I.    30|          Pandafilando de la Fosca Vista, porque es cosa averiguada
25      I.    30|          Pandafilando de la Fosca Vista, para que le mate, y me
26      I.    30|       gran borrasca que tuvimos a vista del puerto, y él y yo salimos
27      I.    30|   Cardenio - ; y tan rara y nunca vista, que yo no sé si queriendo
28      I.    31|         suplicaba y mandaba, que, vista la presente, saliese de
29      I.    35|          la pesadumbre que con su vista Camila recebía; mas el engañado
30      I.    36|    lugares donde alcanzaba con la vista, con tanto ahínco, que parecía
31      I.    36|    asegurándose que él era con la vista, casi fuera de sentido y
32      I.    36|         así como lo pensó, con no vista presteza se abrazó con él
33      I.    41|           hicieron otra día, ya a vista de tierra de España; con
34      I.    41|     tierra de España; con la cual vista todas nuestras pesadumbres
35      I.    41|       pero aunque más tendimos la vista, ni poblado, ni persona,
36      I.    41|    supimos, los primeros que a la vista se le ofrecieron fueron
37      I.    42|       todos puso en admiración su vista; de suerte, que a no haber
38      I.    44|          dio luego en el suelo, a vista del ventero y de los caminantes,
39      I.    47|     contempla en las cosas que la vista o la imaginación le ponen
40      I.    48|         un hermoso valle que a la vista se les ofrecía. Y así por
41      I.    49|         ignorante, o tan corto de vista, que, aunque he visto la
42      I.    50|        compuesta, que alegra a la vista su verdura, y entretiene
43      I.    51|            Finalmente, con una no vista arrogancia, llamaba de vos
44      I.    51|          de su casa, que tenía la vista a la plaza. Enamoróla el
45      I.    51|   sazonadas frutas, no menos a la vista que al gusto agradables.~ ~ ~ ~
46      I.    52|         autor desta nueva y jamás vista historia. El cual autor
47     II.     1|           barba, aunque negra, de vista entre blanda y rigurosa,
48     II.     1|         velloso en el cuerpo y de vista amenazadora; corto de razones,
49     II.     8|          que resucita muertos, da vista a los ciegos, endereza los
50     II.     8|       ciudad del Toboso, con cuya vista se le alegraron los espíritus
51     II.     9|           también fue de oídas la vista y la respuesta que le truje;
52     II.    10|           con ojos desencajados y vista turbada a la que Sancho
53     II.    10|      Siguiólas don Quijote con la vista, y cuando vio que no parecían,
54     II.    11|         se extendió a turbarte la vista ni a encubrirte su belleza:
55     II.    14|       Ofreciéronsele en esto a la vista de don Quijote las extrañas
56     II.    14|         declarados, y con esta no vista furia llegó donde el de
57     II.    16|           el rostro, aguileño; la vista, entre alegre y grave; finalmente,
58     II.    17|           que esto oyó, tendió la vista por todas partes, y no descubrió
59     II.    17|    Rocinante se espantaría con la vista de los leones. Por esto
60     II.    17|           los ojos hechos brasas, vista y ademán para poner espanto
61     II.    17|      llegó el extremo de su jamás vista locura. Pero el generoso
62     II.    17|           de don Quijote, de cuya vista el león acobardado, no quiso
63     II.    20|    primero que se le ofreció a la vista de Sancho fue, espetado
64     II.    21|          levantó en pie, y con no vista desenvoltura se sacó el
65     II.    22|        sabrosa y agradable vida y vista que ningún humano ha visto
66     II.    23|            Ofrecióseme luego a la vista un real y suntuoso palacio
67     II.    23|         remotas y escondidas a la vista nuestra.~ ~ -Verdad debe
68     II.    23|        careciendo de su agradable vista y discreta conversación,
69     II.    26|           y con acelerada y nunca vista furia comenzó a llover cuchilladas
70     II.    29|   líquidos cristales, cuya alegre vista renovó en su memoria mil
71     II.    29|        manera, se le ofreció a la vista un pequeño barco sin remos
72     II.    29|            representaban una mala vista. Daban voces grandes, diciendo:~ ~ -¡
73     II.    30|      selva, tendió don Quijote la vista por un verde prado, y en
74     II.    34|           apearse, encaminando la vista a don Quijote, dijo:~ ~ -
75     II.    34|     tierra, que parecen a nuestra vista estrellas que corren. Oyóse
76     II.    35|        con sus hachas encendidas, vista que admiraba y espantaba
77     II.    36|      andantes, para que viera por vista de ojos si los tales caballeros
78     II.    38|      causa que mi extraña y jamás vista desdicha me ha llevado el
79     II.    39|      guardan los hados esta nunca vista aventura.» Hecho esto, sacó
80     II.    39|      cuáles albarrazadas, de cuya vista mostraron quedar admirados
81     II.    45|         paño, y yo daré la obra a vista de veedores del oficio.~ ~
82     II.    48|          era algún tanto corto de vista, mi señora le despidió,
83     II.    49|        también tiene deseo de ser vista. No digo más.~ ~ El mancebo
84     II.    56|          De la descomunal y nunca vista batalla que pasó entre don
85     II.    57|    adelante no se desmande con la vista ni con las palabras.~ ~ -
86     II.    58|      vuesa merced, y verla ha por vista de ojos.~ ~ Y levantándose,
87     II.    58|            o por mejor decir, sin vista, si toma por blanco un corazón,
88     II.    58|     pasaba de los diez y ocho.~ ~ Vista fue ésta que admiró a Sancho,
89     II.    60|         sangre; pero tendiendo la vista por todas partes, descubrieron
90     II.    61|           don Quijote y Sancho la vista por todas partes: vieron
91     II.    62|       principales de la ciudad, a vista de las gentes, y de los
92     II.    63|         el pobre Sancho perdió la vista de los ojos, y sin duda
93     II.    63| descubrieron un bajel, que con la vista le marcaron por de hasta
94     II.    64|           esta demanda, porque su vista os desengañara de que no
95     II.    68|          en parte que pudiese ser vista: que tal vez la señora Diana
96     II.    72|    descubrieron su aldea, la cual vista de Sancho, se hincó de rodillas,