Parte. Capítulo

 1      I.    Pr|          pariente ni su amigo, y tienes tu alma en tu cuerpo y tu
 2      I.     8|         ellos son gigantes; y si tienes miedo, quítate de ahí, y
 3      I.    10|        yo le haga y te le dé, no tienes más que hacer sino que,
 4      I.    11|       has dado indicio~ ~ ~ ~que tienes de bronce el alma~ ~ ~ ~
 5      I.    11|        cortesía,~ ~ ~ ~de la que tienes colijo~ ~ ~ ~que el fin
 6      I.    18|        rebaños.~ ~ -El miedo que tienes -dijo don Quijote - te hace,
 7      I.    19|          no me acuerdo bien.~ ~ -Tienes mucha razón, Sancho -dijo
 8      I.    20|            Paréceme, Sancho, que tienes mucho miedo.~ ~ -Sí tengo -
 9      I.    21|          los trueques, si es que tienes dellos necesidad extrema.~ ~ -
10      I.    21|         a menudo; que, según las tienes de espesas, aborrascadas
11      I.    21|        ha olvidado.~ ~ -Digo que tienes razón -dijo don Quijote - ,
12      I.    25|           dijo don Quijote - que tienes el más corto entendimiento
13      I.    28|          que fue. Así que, si tú tienes ceñido mi cuerpo con tus
14      I.    28|          Nuestra Señora que aquí tienes.»~ ~ Cuando Cardenio le
15      I.    33|            cuál destas dos cosas tienes en peligro para que yo me
16      I.    33|        Paréceme ¡oh Anselmo! que tienes tú ahora el ingenio como
17      I.    33|      dicho. Pues si tú sabes que tienes mujer retirada, honesta,
18      I.    33|         ahora? O es que tú no la tienes por la que dices, o tú no
19      I.    33|     sabes lo que pides. Si no la tienes por lo que dices, ¿para
20      I.    33|   quieres que yo te saque. Tú me tienes por amigo, y quieres quitarme
21      I.    33|          la mucha discreción que tienes y el extremo de la verdadera
22      I.    33|          que aun las primeras le tienes por decir; y si esto es
23      I.    34|        dijo Lotario - son de que tienes una mujer que dignamente
24      I.    34|      marido, y en qué opinión le tienes; y lo segundo, quiero saber
25      I.    36|          en tus brazos eclipsado tienes te quitan y ofuscan los
26      I.    36|          de noble que las que tú tienes. En fin, señor, lo que últimamente
27      I.    36|         tan impensado trance? Tú tienes a tus pies a tu esposa,
28      I.    40|       allí la respuesta; y si no tienes quien te escriba arábigo,
29      I.    46|      ponerme miedo; que si tú le tienes, haces como quien eres;
30     II.     5|       digo -replicó Sancho - que tienes algún familiar en ese cuerpo. ¡
31     II.     6|        lo son los pobres...!~ ~ -Tienes mucha razón, Sobrina, en
32     II.    17|       quiere sucederme. Dame, si tienes, con que me limpie; que
33     II.    20|     persona sobre mis hombros le tienes puesto; contrapeso y carga
34     II.    20|           que tanto vales cuanto tienes, y tanto tienes cuanto vales.
35     II.    20|     vales cuanto tienes, y tanto tienes cuanto vales. Dos linajes
36     II.    20|        que has hablado, hablas y tienes de hablar en tu vida; y
37     II.    20|      Dígote, Sancho, que si como tienes buen natural y discreción,
38     II.    22| volteando hasta los abismos.~ ~ -Tienes razón, amigo -dijo el primo.~ ~
39     II.    28|       tus salarios el dinero que tienes mío; y si esto es así, y
40     II.    35|          caballero que a tu lado tienes; por tu amo, digo, de quien
41     II.    39|       los emperadores.~ ~ -Razón tienes, Sancho -dijo don Quijote - ;
42     II.    41|     salga a la boca el temor que tienes, a lo menos en presencia
43     II.    43|       moscas; tanto vales cuanto tienes, decía una mi agüela; y
44     II.    43|     gordura y esa personilla que tienes no es otra cosa que un costal
45     II.    43|        mil ínsulas: buen natural tienes, sin el cual no hay ciencia
46     II.    49| justicias hacen.~ ~ -¿Qué oficio tienes?~ ~ -Tejedor.~ ~ -Y ¿qué
47     II.    49|        demonio -dijo Sancho - , ¿tienes algún ángel que te saque
48     II.    54|          hecho franchote, y cómo tienes atrevimiento de volver a
49     II.    54|          sabes que sé yo que las tienes muchas.~ ~ -Yo lo hiciera -
50     II.    55|          dime quién eres, que me tienes atónito; porque si eres
51     II.    57|               De la culpa que tú tienes~ ~ ~ ~Lleve la triste la
52     II.    60|          díjole a Sancho:~ ~ -No tienes de qué tener miedo, porque
53     II.    62|          los infinitos palos que tienes a cuestas? Tu eres loco,
54     II.    62|    locura, fuera menos mal; pero tienes propiedad de volver locos
55     II.    67|     agravias con la remisión que tienes en azotarte y en castigar
56     II.    68|      otra vez, porque sé que los tienes pesados. Después que te
57     II.    69|           que es el tiempo donde tienes sazonada la virtud, y con
58     II.    71|         bóbilis, bóbilis.~ ~ -Tú tienes razón, Sancho amigo -respondió
59     II.    71|          de tu propia mano, pues tienes dineros míos.~ ~ A cuyos
60     II.    71|          ha pintado a éstas.~ ~ -Tienes razón, Sancho -dijo don