Parte. Capítulo

 1     II.    25|     memorables adivinanzas del mono adivino~ ~ No se le cocía
 2     II.    25|      posada? Que viene aquí el mono adivino y el retablo de
 3     II.    25|   maese Pedro. ¿Adónde está el mono y el retablo, que no los
 4     II.    25|       el ventero - : llegue el mono y el retablo, que gente
 5     II.    25|   verle, y las habilidades del mono.~ ~ -Sea en buen hora -respondió
 6     II.    25|      la carreta donde viene el mono y el retablo.~ ~ Y luego
 7     II.    25|      aquél y qué retablo y qué mono traía. A lo que respondió
 8     II.    25|       Trae asimismo consigo un mono de la más rara habilidad
 9     II.    25|    cada pregunta, si es que el mono responde, quiero decir,
10     II.    25|    costa de su lengua, y de su mono, y de su retablo.~ ~ En
11     II.    25| carreta venía el retablo, y el mono, grande y sin cola, con
12     II.    25|       el cual respondió por el mono, y dijo:~ ~ -Señor, este
13     II.    25|        un brinco se le puso el mono en él, y llegando la boca
14     II.    25|            preguntara al señor mono qué me ha de suceder en
15     II.    25|        con las adivinanzas del mono, por parecerle no ser a
16     II.    25|      no ser a propósito que un mono adivinase, ni las de por
17     II.    25|        estraña habilidad deste mono, y hallo por mi cuenta que
18     II.    25|    infunda esa habilidad en el mono, con que gane de comer,
19     II.    25|       creer esto el ver que el mono no responde sino a las cosas
20     II.    25|        es, está claro que este mono habla con el estilo del
21     II.    25|    porque cierto está que este mono no es astrólogo, ni su amo
22     II.    25|    maese Pedro preguntase a su mono si es verdad lo que a vuesa
23     II.    25|     rogó preguntase luego a su mono le dijese si ciertas cosas
24     II.    25|     palabra, volvió a traer el mono, y puesto delante de don
25     II.    25|         dijo:~ ~ -Mirad, señor mono, que este caballero quiere
26     II.    25|      la acostumbrada señal, el mono se le subió en el hombro
27     II.    25|      luego maese Pedro:~ ~ -El mono dice que parte de las cosas
28     II.    26|      de los oyentes, huyóse el mono por los tejados de la ventana,
29     II.    26|  mendigo, y sobre todo, sin mi mono, que a fe que primero que
30     II.    26|     por el trabajo de tomar el mono.~ ~ -Dáselos, Sancho -dijo
31     II.    26|   Quijote - , no para tomar el mono, sino la mona; y docientos
32     II.    26|       podrá decir mejor que mi mono -dijo maese Pedro - ; pero
33     II.    26| reliquias de su retablo y a su mono, se fue también a buscar
34     II.    27|  quiénes eran maese Pedro y su mono, con el mal suceso que don
35     II.    27|        maese Pedro, y quién el mono adivino que traía admirados
36     II.    27|       de Berbería compró aquel mono, a quien enseñó que en haciéndole
37     II.    27|       entraba con su retablo y mono, se informaba en el lugar
38     II.    27| proponía las habilidades de su mono, diciendo al pueblo que
39     II.    27|   pagarle, él hacía la seña al mono, y luego decía que le había
40     II.    27|       dijese cómo adevinaba su mono, a todos hacía monas, y
41     II.    27|   decir de maese Pedro y de su mono. Y volviendo a don Quijote
42     II.    29| Montesinos; que, puesto que el mono de maese Pedro le había
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License