Parte. Capítulo

 1      I.    Pr|        vestros. Si tratáredes de malos pensamientos, acudid con
 2      I.     1|          Decíase él: «Si yo, por malos de mis pecados, o por mi
 3      I.     7|     hartos de servir y de llevar malos días y peores noches, les
 4      I.    16|      decía ella que desgracias y malos sucesos la habían traído
 5      I.    16|       quien tenían despierto sus malos deseos, desde el punto que
 6      I.    18|       sol sobre los buenos y los malos, y llueve sobre los injustos
 7      I.    21|         hacer saber sus buenos o malos sucesos, y rogarále la Princesa
 8      I.    23|       dormir; y como siempre los malos son desagradecidos, y la
 9      I.    23|    enamorado, a quien desdenes y malos tratamientos de su dama
10      I.    24|           merced a la malicia de malos y envidiosos encantadores.
11      I.    27|          los buenos, y aun a los malos muchas veces, sin yo merecerlo
12      I.    29|      ellos, porque las malezas y malos pasos de aquellos lugares
13      I.    31|       hacen por los insolentes y malos hombres que en él viven,
14      I.    34|        pudieron encubrir los dos malos amigos y nuevos amantes.
15      I.    34|    volviera a salir de donde sus malos pensamientos le entraron.
16      I.    41|    quiera poner en ejecución sus malos deseos; ni penséis que la
17      I.    44|          mi pobre padre; que dos malos hombres le están moliendo
18      I.    47|          piedra azufre y a otros malos olores; pero éste huele
19      I.    47|          por envidia y fraude de malos encantadores; que la virtud
20      I.    47|         más es perseguida de los malos que amada de los buenos.
21      I.    48|        divertirla a veces de los malos humores que suele engendrar
22      I.    52|         los buenos, azote de los malos, enemigo de los ruines,
23     II.    Pr|         en libros que, en siendo malos, son más duros que las peñas.~ ~
24     II.     4|        que de todos sus buenos o malos sucesos le avisase, habiendo
25     II.    11|        invidia que me tienen los malos ha nacido su mala andanza.~ ~ -
26     II.    11|          ayudan los buenos y los malos ángeles; y si esta consideración
27     II.    16|        han de querer, o buenos o malos que sean, como se quieren
28     II.    26|        es culpa mía, sino de los malos que me persiguen; y, con
29     II.    31|     usanza que por los años.~ ~ -Malos sean los que me quedan por
30     II.    32|       levantar los fechos de los malos. Perseguido me han encantadores,
31     II.    32|   aparadores. Pero, en fin, sois malos y mal nacidos, y no podéis
32     II.    33|         mano y concavidad, y los malos, ni pie ni entrada. Y paréceme
33     II.    33|        que deben de ser muchos y malos. Verdad sea que la que yo
34     II.    35|    indómito, con una tiramira de malos nombres, que el diablo los
35     II.    40| Malambruno; que Dios sufre a los malos, pero no para siempre.~ ~ -¡
36     II.    44|       que nos libre a los dos de malos hechiceros y de malos encantadores. -
37     II.    44|         de malos hechiceros y de malos encantadores. -No es burla,
38     II.    49|         ralea: digo, a la de los malos médicos; que la de los buenos
39     II.    51|     vuesa merced suelen usar los malos encantadores; yo lo sabré
40     II.    55|          sus gobiernos todos los malos gobernadores; como sale
41     II.    56|         causa el Duque, sino los malos encantadores que me persiguen,
42     II.    61|       los muchachos, que son más malos que el malo, dos dellos