Cap.

 1      2|   uniforme y monótono compás de pies.~ ~ Dos horas habían transcurrido
 2      3|  sobrecargarla; descansaban sus pies en un lindo taburete, y
 3      5|      dejamos referido.~ ~ A los pies de entrambos dormía un soberbio
 4      5|        poderoso alano que a sus pies roncaba - , al cual distinguía
 5      5|         hollaré con mis propios pies ese altar funesto que nos
 6      8|     desde la garganta hasta los pies, que, desnudos, parecían
 7     10|         armados, al parecer, de pies a cabeza, pero unas especies
 8     10|      Albornoz arrojándose a sus pies y estrechando sus rodillas;
 9     10|       largo manto negro, que de pies a cabeza la ocultaba, y
10     11|        y hecha la tercera a los pies casi del trono:~ ~ -Poderoso
11     11|       de las peñas y sus buenos pies le salvaron, por desdicha
12     12|       libertador, se echó a sus pies, y con lágrimas de gozo
13     13|        por otra parte, aunque a pies juntillas hubiera creído
14     14|     hasta los ojos y roto a sus pies el laúd, permanecía cuando
15     14|       condesa se arrojará a los pies del Rey y denunciará la
16     14|        iba a prosternarse a sus pies, iba a hablar, pero un ademán
17     17|          Señor, desea besar los pies de tu alteza el sublime
18     17|            Beso a tu alteza los pies -dijo - por la lisonjera
19     17|     tapada lentamente hasta los pies del trono y prosternóse
20     17|   precipitados. Venía armado de pies a cabeza; su sobrevesta
21     18|           Temblaba ya Ferrus de pies a cabeza con la explicación
22     21|         enteramente; uno de sus pies adelantado indolentemente,
23     21|         Arrojóse entonces a sus pies, e iba a levantar con mano
24     21|    queréis que muera a vuestros pies.~ ~ -Y bien, yo soy -respondió
25     22|              Imaginé haber oído pies de caballos en el camino
26     22|       hizo venir a tierra a los pies del enfurecido doncel. Vencedor
27     23|         dada cierta noche a los pies de la habitación de la condesa,
28     25|         hallábase uno armado de pies a cabeza, que se había mantenido
29     27|         paje, que sentado a sus pies la miraba de hito en hito
30     27|        que arrodillado ya a sus pies parecía implorar el perdón
31     28|         precipicio que ante sus pies miraba. Amaba a su esposo
32     28|     Elvira precipitándose a los pies de Hernán Pérez.~ ~ -¿Cómo
33     28|  infeliz Elvira declaraba a los pies de su suspicaz esposo su
34     29|         rodillas, abrazando los pies del hidalgo, y dando su
35     30| vasallos venir a implorar a los pies del trono la justicia que
36     31|        Macías arrojándose a los pies de su amante -. Mil obstáculos
37     34|     bastará con que lo creáis a pies juntillas. Además ya habréis
38     35|       en seguida fuertemente de pies y manos a sus mismas poltronas,
39     35|   penetrante, arrojándose a sus pies al mismo tiempo, con todo
40     36|         del torrente, que a los pies de la torre por la honda
41     37|       golpe, se precipitó a los pies del trono exclamando:~ ~ -¡
42     38|     para ser suspendido por los pies en un patíbulo.~ ~ Disponíanse
43     39|          que casi debajo de sus pies corría, paseaba entretanto