Cap.

 1      1|       los condes de Génova de la casa de Oliveros, y por parte
 2      1|          Boloña, parientes de la casa real de Francia, se amotinaron,
 3      2|       los dignos escuderos de mi casa -y arrojó al descuido una
 4      2|      quienes tales oficios de su casa estaban cometidos; la situación
 5      3|         enclavada en medio de su casa.~ ~ Arrojóse la condesa
 6      6|           vuestro servicio en mi casa; excusáis volver a Calatrava;
 7      7|    ignorado en la armazón de una casa vieja, que no ha menester
 8      9|     caballeros y escuderos de su casa, oficiales de su servicio,
 9      9|      caballeros y monteros de tu casa; al llegar al alcázar habíame
10      9|          algunos escuderos de la casa de Su Señoría. El movimiento
11     10|         las armas reunidas de su casa y la de Aragón; cubriéronla
12     10|    cabeza de los ofíciales de su casa corriendo el Campo del Moro
13     11|      primeros oficios de la real casa de Su Alteza, las principales
14     11|          de los caballeros de su casa. Sucedió el mayor silencio
15     11|        detrás un caballero de su casa con el estandarte de sus
16     11|         contábanse criados de su casa, cuya falta había notado
17     14|        salían, sobre todo, de su casa o cuando habían de hablar
18     17|     caballeros y escuderos de su casa.~ ~ Ocupaba don Enrique
19     17|       todos los caballeros de tu casa, a lanza o a espada, a pie
20     19|            Llegado don Luis a su casa, llamó a su escudero y le
21     19|          hallarse reunidos en la casa posada de don Luis de Guzmán
22     19|        preocupado al dueño de la casa, sentábase cada cual y esperaba
23     19|          caballeros; reunidos en casa del comendador para acabar
24     22|       más adelante, camino de la casa de El Pardo, que a la sazón
25     28|          no puede sino honrar mi casa.~ ~ Preciso le fue al paje
26     28|         mi lecho, os entregué mi casa, porque os amaba, Elvira.
27     28|      pero el doncel estaba en su casa todavía. La menor imprudencia
28     29|         porque me ha confiado su casa, porque me dio su corazón,
29     31|        rabiando las noches... La casa es un infierno. Felizmente,
30     32|         de Monilla. Era ésta una casa no muy grande, comparada
31     32|    cocina, pieza principal de la casa. Un mal hogar, coronado
32     32|        semana no se ha cocido en casa todavía, y ha cargado tanta
33     32|       los que... es decir, de la casa del señor maestre de Calatrava.~ ~ -
34     32|          más que un candil en la casa, contando con éste.~ ~ Dicho
35     32|    hospedaba aquella noche en su casa y a quienes con tan poco
36     32|      libre de que se quite en mi casa la honra a nadie! Además,
37     32|       señores; pero mirad que mi casa...~ ~ -Voto a la casa, señor
38     32|         mi casa...~ ~ -Voto a la casa, señor Nuño, que hemos de
39     33|         por montear al venado de casa, y el perro no engaña nunca
40     37|     caballeros y escuderos de su casa, vasallos suyos. Requerido
41     38|        Si digo que está llena la casa! No hay posada, compadre -
42     38| caballeros y gentileshomes de su casa, vasallos suyos, vestidos