Cap.

 1      1|    había especie de ambición ni pasión frenética de que no se dejasen
 2      3|      defecto que la venda de la pasión no nos había permitido ver
 3      5|       del día, en muestra de su pasión montaraz. Con esta pequeña
 4      5|         a ocupar el lugar de la pasión y se le oía entre dientes: «
 5      6|      que el amor era la primera pasión del joven. Su frente ancha,
 6     11|        si una venganza o si una pasión?...~ -¡Ay de quien osare
 7     15|       fuera de la Corte por una pasión que le domina...~ ~ -¿Qué
 8     15|     logramos poner en juego esa pasión, pienso que si el doncel
 9     19|        natural elocuencia de la pasión que dominaba en el comendador.~ ~ -¿
10     23|         servir amistosamente la pasión de Macías ni hacer gran
11     24|     alguna acerca de su amorosa pasión. El doncel, desde aquella
12     26|      participase de la culpable pasión de Macías, pero eran tan
13     26|   amantes en el laberinto de su pasión, aun a pesar del ciego temor
14     26| alternativa que a tan frenética pasión quedaba.~ ~ ~ ~
15     28|       tormentos, a la encendida pasión de su imprudente amante.
16     28|     inspirado inocentemente una pasión frenética, que sólo podía
17     29|    Jaime! Maldecida sea mi loca pasión. ¡Sí, dices bien! Yo le
18     30|        que nunca poseído de una pasión frenética; pasión cuyos
19     30|        de una pasión frenética; pasión cuyos resultados, felices
20     31|         quien compadece vuestra pasión; quien os ha de consolar
21     32|      correspondido primero a su pasión, pero le había dejado después,
22     33|   amante al tierno objeto de su pasión -. ¡Bravonel! El que no
23     39|        agitada, su voz ronca de pasión, ahogada por el amor, pidiendo
24     39|         a otro.~ ~ -Te ciega tu pasión, Macías -contestó el montero -.