Cap.

 1      6|     corazón a no dejar perecer la inocente y débil oveja a manos del
 2      7|    cautivado sin mucho trabajo el inocente corazón de la niña Elvira;
 3     10|       colérico arrebato contra su inocente esposa.~ ~ Bien quisiera
 4     10|           al león el jugar con la inocente y crédula oveja? Ved mi
 5     13|        brazo podía ser útil a una inocente; pero si es fuerte contra
 6     17|          calumnia se embota en el inocente como la punta de la lanza
 7     21|        por el tímido balido de la inocente oveja.~ ~ Detúvole, empero,
 8     22|       está ileso. Vuestra esposa, inocente.~ ~ -Probádmelo.~ ~ -Con
 9     23| ocurrírsele un momento antes: era inocente; declararía a su esposo
10     23|        tampoco efecto alguno este inocente arbitrio, quedóse al cabo
11     27|        conoces, tú que sabes cuán inocente soy...~ ~ -¡Oh! Si yo fuera
12     28|         no amarle? Era, pues, tan inocente como desgraciada.~ ~ La
13     28|       palabras, señor... ¡Ah! soy inocente -exclamó Elvira precipitándose
14     28|          yo dudarlo, Elvira? Sois inocente; pero ¿basta acaso en el
15     28|          mundo en que vivimos ser inocente? ¿No es fuerza parecerlo
16     29|           con su mano la boca del inocente -. Macías... partid.~ ~ -
17     29|                  Jaime, señor, es inocente, inocente; nunca quiso jugar
18     29|        Jaime, señor, es inocente, inocente; nunca quiso jugar con vuestra
19     30|        contento y satisfacción su inocente entusiasmo.~ ~ Vuelto en
20     32|        ello inculpación alguna al inocente moro.~ ~ Enfrente del castillo,
21     38|         Don Enrique de Villena es inocente. Elvira es calumniadora.
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