Cap.

 1      1|         nuestros antepasados de cuatro o cinco siglos: nuestra
 2      2|        sabéis que veníamos para cuatro días, y no llevamos sino
 3      2|      dar por el bosque a más de cuatro cazadores inexpertos -y
 4      2|        nuestros interlocutores; cuatro tapices de extraordinaria
 5      3|        ardían lentamente en los cuatro ángulos del salón principal
 6      3|         tres días y fueron para cuatro.~ ~ -No importa; no he podido
 7      4|      caballeros; una lámpara de cuatro mecheros, suspendida del
 8      5|        vencido,~ ~ ~ ~Dice: -De cuatro elementos,~ ~ ~ ~El fuego
 9      5| levantándose Bravonel sobre sus cuatro patas, abrió una boca disforme,
10      6|         estrellas ser la de las cuatro, a entregarse al descanso
11      7|        luego... una, dos, tres, cuatro, cinco, seis. No hay duda.~ ~
12      9|   entrado?.~ ~ -Podrían ser las cuatro, si dicen las horas las
13      9|         las estrellas.~ ~ -¿Las cuatro? A esa hora... ¿no habéis
14      9|         A esa misma hora de las cuatro le envié a reconocer al
15     33|          alzóse Bravonel en las cuatro patas, lamió la mano que
16     34|   agujero redondo y cerrado con cuatro hierros cruzados y practicado
17     34|            éramos dos y seremos cuatro. Aún queda vino en esa vasija
18     35|         la cual se sentaron los cuatro con la mayor armonía y fraternidad.
19     35|      siguieron cenando nuestros cuatro paladines, conversando acerca
20     38|      conducida y custodiada por cuatro archeros, una mujer joven
21     39|        La impaciencia que a los cuatro animaba no les permitió