Cap.

 1      3|        sueltas que llegaban a sus oídos enteras de rato en rato,
 2      6|          confusamente llegó a sus oídos dio indicios de que había
 3      7|       negado constantemente a dar oídos a toda proposición amorosa
 4      8|         se viene a regalarnos los oídos a deshoras de la noche;
 5      8|      infeliz Elvira, que era todo oídos, pues nada alcanzaba a ver.
 6      8|        Llegó el ay dolorido a los oídos de los dos que hablaban,
 7     10|         luego funestamente en sus oídos y en su corazón, y el silencio
 8     13|          dolor cuando llegó a sus oídos la funesta nueva, que de
 9     25|           parecen sonar mal a los oídos delicados. Podemos asegurarles,
10     27|          ojos, su recuerdo de mis oídos. Yo os lo pido, y os lo
11     27|          voz harto conocida a los oídos de Macías y de Elvira -.
12     28| Permitidme que en ese punto no dé oídos, señor, a vuestras reconvenciones... -
13     32|           su Zelindaja, que hacía oídos de mercader, y no parecía
14     38|      vertido el caballero por los oídos y las narices al recibir
15     39|  misericordia, resuena aún en mis oídos. La estrecho entre mis brazos.