Cap.

1      3|  alambre. Pero, al cabo, estas tareas y otras semejantes, aunque
2      8|       empeñado en las ingratas tareas del escritorio, y llegar
3     11|     continuaba en sus ímprobas tareas de desasnar raqueros bravíos
4     11|        sujetarle a las diarias tareas de desenmallar la sardina,
5     13|        sin disgusto a aquellas tareas tan ingratas para quien
6     13|        después de volver a sus tareas de escritorio, continuó
7     13| quebrantado por el peso de las tareas del entresuelo, se encerraba