Cap.

  1    Pró|   Santander que aún vivan~ ~ Así Dios me salve como no he pensado
  2    Pró|       estas páginas; déjese, por Dios, de invocar nombres de extranjis
  3      1|           A qué, santo nombre de Dios?... Y ¿por qué, Virgen María
  4      1|         otra cosa, y alabado sea Dios per omnia saecula saeculorum,
  5      1|    cuando hay chaqueta, vaya con Dios; pero sin calzones... ¿Adónde
  6      1|        secado todavía, hombre de Dios?~ ~ -Los royó una vaca mientras
  7      1|      agolía mal.~ ~ -¡Castigo de Dios, Muergo; castigo de Dios! -
  8      1|         Dios, Muergo; castigo de Dios! -dijo fray Apolinar rascándose
  9      2|     Cristo, qué marca! ¡Madre de Dios, qué cámbaros!... ¡Atracarvos,
 10      2| tripulación, casi por milagro de Dios, y, después, cómo daba a
 11      3|          en próspera fortuna... ¡Dios de bondad!... En fin, casi
 12      3|        de la Sargüeta. Que costó Dios y ayuda reducir a Mocejón
 13      4|  parigual y conforme a la ley de Dios, que nos manda que cada
 14      4|          aguarda allá arriba, si Dios no se pone de su parte.~ ~ -¡
 15      4|        añadió la marinera - , si Dios antes no lo remedia. ¡Eso
 16      4|       Métete en la mía, ángel de Dios, siquiera hasta mañana! -
 17      4|            Pero escucha, alma de Dios!... ¡Pero aguarda, probetuca!...~ ~
 18      4|        sacerdote..., ni temor de Dios! ¡Y seguirá el improperio
 19      4|     ocasión! Mira, hombre..., ¡y Dios me confunda si lo hago por
 20      4|  ventisca le llevó hoy, santo de Dios, a caer entre las uñas de
 21      4|    amparo?~ ~ -Como no sea el de Dios... -respondió el fraile.~ ~ -
 22      4|          inocentes, pae Polinar. Dios lo hace. Y usté ¿qué rumbo
 23      4|     estáis dejados de la mano de Dios? ¡Tenéis la paz y buscáis
 24      4|        de faltaros el auxilio de Dios. Mi deber era poneros en
 25      5|          está a la intemperie de Dios y necesita de un mendrugo
 26      5|        tiempo pa divertirte como Dios manda.~ ~ -¡Uva! -exclamó
 27      5|           no merecerás perdón de Dios, ni cuentes conmigo, por
 28      5|      conque, Sidora, a la paz de Dios... Creo que se podrá salir...,
 29      5|        agradece la precaución, y Dios te lo pague.~ ~ Tornó a
 30      6|         se les pasaba, hasta que Dios dispusiera de ellos, según
 31      7|         esperaba él, y bien sabe Dios lo que le desazonaba; pero
 32      7|          de casa entretenía como Dios y su impaciencia le daban
 33      7|      ponía, le estaba pidiendo a Dios que le inspirara un modo
 34      7|          o le recogiera el mismo Dios la patente, dándole sepultura
 35      8|          lleva por esos mares de Dios con una suerte rara. Verdaderamente,
 36      8|         y de los vapores (que, a Dios gracias, no pasa de una
 37      9|     aguantaron. Ahora, gracias a Dios, estaba Silda en puerto
 38      9|    percal, casi que nueva; y, si Dios quiere, hemos de mercar
 39      9|         No es eso, venturaúca de Dios?... Pero ¿qué mil demontres
 40     10|         más dejado de la mano de Dios, para entrar, con deliberado
 41     11|        contarle lo que me pasa, ¡Dios!, y ver si en un apuro puede
 42     11|         alumbrarme el varazo... ¡Dios!... Entonces ya no pude
 43     11|          presidio que al latín, ¡Dios!...; y al que se empeñara
 44     11|         Vamos, que pa too lo que Dios crió hay remo allí, con
 45     11|        sus males, el angeluco de Dios la adevina los pensamientos
 46     11|             Pues no da gloria de Dios ver cómo le cae hasta un
 47     11|          de obra del angeluco de Dios: «esto, Sidora, no es mujer,
 48     12|     enjusticias contra la ley de Dios! Y mira que no me llegara
 49     12|         de aquellas playas, sabe Dios adónde, para no volver más
 50     13|           se dio a pintar cuanto Dios crió y se le metía por los
 51     13|         que era una bendición de Dios. A los diecisiete años rebajó
 52     13|        ceja a todas las horas de Dios.~ ~ -Ya lo ves -le decía
 53     13|          hace a todo el ángel de Dios. ¡Si te digo que saca una
 54     13|        conformes. Lo que esté de Dios, a la mano ha de venirse;
 55     14|          tan dejao de la mano de Dios que se mete en este oficio. ¡
 56     14|    amparo que la misericordia de Dios! Mire usté, don Andrés:
 57     14|      cara toman eso? ¿Hay ley de Dios, u no hay ley de Dios? Esta
 58     14|         de Dios, u no hay ley de Dios? Esta casa, ¿es casa...,
 59     14|        mujer, dos «aventuraos de Dios» y muy agradecidos al otro.
 60     14|      juró, delante de la cara de Dios, que en su vida le había
 61     14|          en todo el santo día de Dios.~ ~ Sí, bien apurado el
 62     15|         terrestres, que hijos de Dios son como cualquiera y tan
 63     15|          que salga a la buena de Dios?~ ~ Ocurriósele a Cleto
 64     15|    enseñados y con la palabra de Dios, verbum Dei, entre los labios!...
 65     15|       suceder, porque la mano de Dios alcanza a todas partes,
 66     15|          infeliz que perdone por Dios, que yo no puedo socorrerla.~ ~ -
 67     15|               Qué duro, mujer de Dios?~ ~ -El de la misa de don
 68     15|        despachen en su casa como Dios les  a entender.~ ~ Tras
 69     16|    refresca... ¡Y por el amor de Dios, hijo mío!, no salgas muy
 70     16|         del puerto: «Alabado sea Dios», y rezara y mandara rezar
 71     17|       abajo todo el santo día de Dios; ¡y ella le da cada sofión
 72     17|     arriba y abajo, las horas de Dios, con esos marinerazos...
 73     17|       que andan a todas horas de Dios con hombrones de la Zanguina
 74     18|         siéntate, por el amor de Dios, que yo te prometo no propasarme
 75     18|       defenderme, como es ley de Dios.~ ~ -Pero tú misma me has
 76     18|         honra... ¡Por el amor de Dios, Andrés! Tú que sabes lo
 77     18|     señor de ti mismo; ahora que Dios te corre la venda de los
 78     20|            Por esos mares!... Si Dios quisiera que no le allegara
 79     20|          coser.~ ~ -¡Bendito sea Dios! -dijo tía Ramona por despedida - . ¡
 80     20|         dispuesto a hacerle como Dios y sus ahogos le dieran a
 81     20|     Sotileza! Mira, lo mesmo que Dios está en los cielos, lo que
 82     21|          ni entro ni salgo... ¡Y Dios me librará de ello, jinojo!~ ~
 83     21|       Hoy na te falta, gracias a Dios; pero mañana o el otro...
 84     21| respóndenos algo, por el amor de Dios, pa que uno sepa los tus
 85     21|          Así estoy a gusto..., y Dios dirá mañana. ¿Me entienden
 86     21|         seas burro!... ¡Madre de Dios!, ¡qué arte de vestirse!... ¡
 87     21|       sea el Santísimo Nombre de Dios! -exclamó la marinera contemplando
 88     22|           de bote en bote y como Dios y su agilidad les dan a
 89     23|         por tomarlo a castigo de Dios...; que bien pudiera, ¡cuerno!,
 90     23|           y al mesmo angeluco de Dios éste, que bien se le bajó
 91     23|        mortal? ¡Seré venturao de Dios esa criatura!... ¡Vea usté!
 92     23|     estarlo. ¿Nordá, saleruco de Dios?~ ~ Cuando salió Andrés
 93     23|   señorona, solos, los probes de Dios, están en la bodega a puerta
 94     23|          te sofocas, inocente de Dios? ¡Pos bien a la vista estaba! ¡
 95     23|          Y delante de la cara de Dios, tan bribona es la que se
 96     23|            Pero ¿por ónde salgo, Dios mío?... ¡Y yo quiero salir!... ¡
 97     23|        por delante de la cara de Dios, nos encerrastes allá, pensando
 98     23|          por dejao de la mano de Dios que esté, que se atreva
 99     23|          infame bien abandoná de Dios! Mira, ¡envidiosa y desalmada!,
100     23|          haya visto... ¡y quiera Dios que vos atreváis a decirlo
101     24|  marquesa del pingajo... ¡Ira de Dios!... Esto no se puede sufrir,
102     24|           Pedro, ¡por el amor de Dios!, cálmate un poco -díjole
103     25|        semana siquiera. Después, Dios diría... Y remando así,
104     25|     entoavía, si ese angeluco de Dios no penara tanto y considerara
105     25|          hay quien la crea.~ ~ -¡Dios que la ha visto, hijuca;
106     25|         que la ha visto, hijuca; Dios que la ha visto! -exclamó
107     25|   castigue en el mundo antes que Dios las  allá lo que merecen?...~ ~ -
108     25|         nunca viene solo... Pero Dios está en los cielos, y hará
109     25|        la pena a ese angeluco de Dios, y no te alcuerdes de mí,
110     25|      Cuenta, cuenta, saleruco de Dios, sin reparo de na, pa que
111     25|          en todo el santo día de Dios en esta casa.~ ~ Con estas
112     25|       sea; pero, ¡por el amor de Dios, señor don Pedro!, mire
113     26|         lanchas a la mar?~ ~ -Si Dios quiere y el tiempo no empeora.~ ~ -¿
114     26|          mañana, Reñales.~ ~ -Si Dios quiere, don Andrés.~ ~ No
115     27|          le impusiera, y que por Dios, y que por los santos...
116     27|   dejemos estas boberías... ¡Ay, Dios mío de mi alma!... Mira,
117     27|        caer en ello, inocente de Dios! -exclamó Luisa, lanzando
118     28|         aquella postura, alabó a Dios desde lo más hondo de su
119     28|        las grandes maravillas de Dios y al olvido absoluto de
120     28|     desde proa:~ ~ -¡Alabado sea Dios!~ ~ Ésta era la señal de
121     28|      comer en paz y en gracia de Dios.~ ~ Entonces cayó Andrés
122     28|       aquel instante y temió que Dios hubiera dispuesto arrancársela
123     28|         una misa a la Virgen, si Dios obraba el milagro de salvarles
124     28|     horrores juntos, y alababa a Dios delante de aquel pavoroso
125     28|         se cumpla la voluntad de Dios!~ ~ ¡Adelante! Adelante
126     28|              Ponerse en manos de Dios y entrar por donde se pueda -
127     29|       que las piadosas ofertas a Dios; en momentos de grandes
128     29|         dempués de haberle sacao Dios con vida de aquel apuro
129     29|        acabo de entender por qué Dios me da esta vejez tan regalona;
130     29|       falta con ello a la ley de Dios, que quiere corazones agradecidos
131     29|         de calvario, saleruco de Dios!~ ~ A estas exclamaciones
132     29|        Lo ves, Sidora? ¿Ves como Dios está en los cielos y tiene
133     29|           Lo mesmo que la luz de Dios que nos alumbra!~ ~ Había
134     29|          Bendita sea la bondá de Dios, que tiene tanta compasión
135     29|        el agravio, por caridá de Dios...~ ~ Tranquilizaron todos
136     29|         cuentes con el perdón de Dios.~ ~ Cleto, por toda respuesta,
137     29|  embarcarais sin la bendición de Dios por esta mano pecadora!~ ~
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