Cap.

  1      3|          a la vista, porque entre bodega, cabretes, subdivisiones
  2      3|            tía Sidora, ocupaba la bodega, o sea la planta baja de
  3      4|       iban a los inquilinos de la bodega detrás de la niña que jugaba
  4      4|        haber resonado hasta en la bodega los horrores que vomitaban
  5      4|        par en par la puerta de su bodega, llegó al quinto piso, y
  6      4|               El matrimonio de la bodega salió despavorido al portal,
  7      4|       manteo y le condujeron a la bodega, cuya puerta cerraron después
  8      4|          de rosas parecía aquella bodega, comparada con todas y cada
  9      4|           cerrada la puerta de la bodega - . ¡Esa es la fija: proba
 10      5|        tía Sidora.~ ~ -¿Los de la bodega?~ ~ -Creo que sí.~ ~ -¿Y
 11      5|        niña, y se colocaron en la bodega de tío Mechelín, cuya mujer
 12      6|           miá tú, chaquetín de la bodega, si quiés decir algo, lo
 13      7|           estivaba tal cual en la bodega, fue del tenor siguiente:~ ~ -¿
 14      9|         toña!, que le saque de la bodega ese hipomal rayo!; y esta
 15      9|         En esto salió de hacia la bodega Silda, acompañando a Muergo.
 16     10|    redondo, aunque se abarrote la bodega y se encogolle el puente
 17     10|       loca llega a abarrotarse la bodega en poco más de mes y medio.
 18     10|         bajó hasta el fondo de la bodega con la agilidad y firmeza
 19     10|       pareció bien la gente de la bodega; pero la bodega y el resto
 20     10|       gente de la bodega; pero la bodega y el resto de la casa, no
 21     10|       párrafos con la gente de la bodega, porque además de que tío
 22     10|         pasaban por delante de la bodega, porque cuando uno no quiere
 23     10|      presentándose a menudo en la bodega, con el poquísimo aseo que
 24     10|          Tolín en apartarle de la bodega de la calle Alta, porque
 25     11|         porque nunca volvía de la bodega sin haber sacado de ella,
 26     11|          honrado matrimonio de la bodega; sólo que no se tomaba el
 27     11|      serenamente y se volvió a la bodega, donde estaba tía Sidora,
 28     11|          marco de la puerta de la bodega, acabando de echar un remiendo
 29     11|           la tarea; metióse en la bodega Silda, mientras Cleto, sin
 30     12|           días, a la puerta de la bodega, en lo alto del Paredón,
 31     12|        Cleto frecuentaba mucho la bodega. El pobre muchacho, que
 32     12|           este algo pareció en la bodega, en la jovialidad de tío
 33     12|         iba llenando ella sola la bodega con todas estas cosas y
 34     12|           con nuevas ansias de la bodega, y en cuanto hallaba un
 35     12|           que el matrimonio de la bodega no miraba con malos ojos
 36     12|        buen fin a la puerta de la bodega. Y no contando ni debiendo
 37     12|         larga y aprovechada, a la bodega de su tío. Como pudiera
 38     12|               En sus visitas a la bodega de la calle Alta, se encontraba
 39     12|        amparo de las gentes de la bodega, dominaba bastante el vicio.
 40     12|           pudiera ocurrirle en la bodega, si entraba en ella a la
 41     13|  consideraban y se divertía en la bodega de la calle Alta, y junto
 42     13|         despegue de esa condenada bodega de la calle Alta.~ ~ -¿La
 43     14|      ahorros se agotaron, y en la bodega comenzaron a sentirse varias
 44     14|        las mustias alegrías de la bodega de la calle Alta, y fueron
 45     14|           a poco sus visitas a la bodega. ¿Qué demonios pasaba allí? ¿
 46     14|           menudo desde la humilde bodega a la casa del capitán, poco,
 47     14|           el apego de Andrés a la bodega y con la fresca juventud
 48     14|      afrentoso en la puerta de la bodega? ¿Para qué se necesitaba
 49     14|        cuando le encontraba en la bodega, y vigilar la calle para
 50     14|           no fue de tertulia a la bodega.~ ~ Pero ¡qué frágil y mísera
 51     14|      alejándose poco a poco de la bodega, y sin echar un punto de
 52     14|   frecuentaría menos que antes la bodega, pero volvería a ella, ¡
 53     14|       primera vez que volvió a la bodega después de haberse entregado
 54     14|           y para las gentes de la bodega hubiera sido retirarse de
 55     14|        que se propuso tomar en la bodega de la calle Alta aquellas «
 56     15|         si había de echarle de la bodega para siempre a fuerza de
 57     15|        arrimado para siempre a la bodega, y lo que temía llegar a
 58     15| influencia entre las gentes de la bodega había pensado también otras
 59     15|        paño!, que me anadan en la bodega.~ ~ Poco después, alumbrados
 60     15|      Porque yo, al hallarte en la bodega alguna de las veces que
 61     15|         entre el quinto piso y la bodega no puede haber amaños ni
 62     15|     capaces de prender fuego a la bodega, y a la casa, y a todos
 63     15|         el que vayas viendo en la bodega, y algo que yo te apunte
 64     16|        todo lo perteneciente a la bodega, donde había tantas cosas
 65     16|           para las honduras de su bodega:~ ~ -Mientras Andrés la
 66     17|         de la pobre familia de la bodega! ¡La honrada vanidad que
 67     18|          Sotileza trajinaba en la bodega, en su habitual arreo doméstico:
 68     18|    obligarse a no volver más a la bodega, pues hombre que había jurado
 69     18|     intenciones; y no volver a la bodega era empresa superior a las
 70     18|      salió, como disparado, de la bodega.~ ~ ¡Él, que había entrado
 71     18|        puso la planta fuera de la bodega; y tan abstraído le llevaba
 72     19|   voluntades del matrimonio de la bodega; pero nunca vio el camino
 73     19|          iba a pasar un rato a la bodega, donde hallaba a Sotileza,
 74     19|       ocasión, y ésa dentro de la bodega y delante de la gente. Gruñeron
 75     19|     discurso.~ ~ Andando hacia la bodega encontróse, al abocar a
 76     19|         no fue aquella noche a la bodega.~ ~ Al día siguiente se
 77     19|       mano a mano y a solas en la bodega; quiere decir, que era menos
 78     19|      Sotileza estaban solos en la bodega, mientras tío Mechelín,
 79     19|    Sotileza en cuanto entró en la bodega.~ ~ -Salió a comprar tabaco -
 80     19|       comenzaba a anochecer en la bodega. Con este motivo, si es
 81     19|        dado Sotileza, salió de la bodega con rumbo a la Zanguina,
 82     19|       Poco después de salir de la bodega tío Mechelín, entró en ella
 83     19|       embajada, manifestara en la bodega sus intenciones y deseos;
 84     19|          Alta?~ ~ -Sí.~ ~ -¿De la bodega de tu tío?~ ~ -Sí. Fui a
 85     20|         de este modo, entró en la bodega la vieja tía Ramona, el
 86     20|      horas, y el matrimonio de la bodega, vestido de media gala,
 87     20|     cuando vio a los viejos de la bodega salir a la calle juntos.~ ~
 88     20|          y se coló resuelto en la bodega.~ ~ Sotileza continuaba
 89     20|        Voy a entrar un rato en la bodega.» Y por eso entré... ¡Paño! ¡
 90     20|     entraña con el recreo de esta bodega, una vez que otra. Arriba,
 91     20|        vivir como se vive en esta bodega, quiero trabajar pa ti,
 92     20|           aquella vez Cleto de la bodega, mustio y pesaroso, cuando
 93     21|          casa al matrimonio de la bodega de la calle Alta para hablarle
 94     21|       acababa de ventilarse en la bodega. De modo que, a media palabra
 95     21|               Con este motivo, la bodega de tío Mechelín se vio por
 96     21|           él por sus visitas a la bodega... y la actitud de su padre,
 97     21|  crecimiento de tertulianos en la bodega, porque así pasaba él más
 98     21| esperanzas.~ ~ Muergo volvió a la bodega dos noches después de aquel
 99     21|     Zanguina; pero entraron en la bodega tía Sidora y su marido,
100     22|           con toda la gente de la bodega y algunos agregados, los
101     23|     juntas la tal y la cual de la bodega de abajo, y aprendería lo
102     23|           última proeza.~ ~ En la bodega de Mechelín no cabía la
103     23|        que a esto se siguió en la bodega, que un mozo de las condiciones
104     23|         Cuando salió Andrés de la bodega, muy poco después de esta
105     23|         vio entrar a Andrés en la bodega. En seguida subió volando
106     23|          acercó a la puerta de la bodega. Estirando el pescuezo,
107     23|       probes de Dios, están en la bodega a puerta cerrá!... ¡y que
108     23|           supuesta engatada de la bodega de Mechelín, que para eso
109     23|         en cuando la puerta de la bodega retemblaba, sacudida por
110     23|          que hizo la puerta de la bodega al ser cerrada por Carpia;
111     23|          miraban después hacia la bodega. Sintió un frío mortal en
112     23|        bien vistos al salir de la bodega juntos, habrán armao esa
113     23|          rostros vueltos hacia la bodega, y oía las palabras infamantes
114     23|      tentativa en la puerta de la bodega. Al acercarse a ella tropezaron
115     23|           trancar la puerta de la bodega.~ ~ -Y yo echar la llave
116     23|         rincón más apartado de la bodega. Mares de llanto vertió
117     24|         él estaba encerrado en la bodega, y cuando salió hasta el
118     24|       decirnos a qué ibas tú a la bodega esa de la calle Alta.~ ~ -
119     24|         que lo del encierro en la bodega y lo del escándalo en la
120     25|         aspecto el interior de la bodega de tío Mechelín! ¡Qué cuadro
121     25|          casa con el agua a media bodega, y encuentra aquí el sospiro
122     25|          reinar el silencio en la bodega.~ ~ Así estaba el cuadro
123     25|           había ido a buscar a la bodega de la calle Alta; pero el
124     26|         habría pasado en la pobre bodega desde que él había bajado
125     27|      hombre así, encerrado en una bodega asquerosa, con una sardinera
126     29|          poner más los pies en la bodega; que aquella meritísima
127     29|        dar el último vistazo a la bodega de la calle Alta.~ ~ Está
128     29|    infeliz que se deshacía. En la bodega fueron todos a consolarla;
129     29|    hablado mucho sobre ello en la bodega; y se estaba hablando ya
130     29|        aquel instante entró en la bodega don Pedro Colindres. Padre
131     29|      salió precipitadamente de la bodega.~ ~ Padre Apolinar se encasquetó
132     29|          se quedaba un rato en la bodega animando a tío Mechelín
133    Sig|           huecos que quedan en la bodega de un buque después de cargado.~ ~
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