Cap.

 1      1|          bajo de techo y triste de luz; negreaban a partes las
 2      1|           lo cual, por horror a la luz, era obra la encorvadura
 3      2| despilfarrando alegre sus haces de luz, que centelleaba entre los
 4      2|        vista se hartaba de aquella luz reverberante, parlanchina
 5      3|         cuidados; y no hay como la luz de los cuidados para que
 6      3|            que no los ofendiera la luz; un mantón de lana, también
 7      3|          espacio reducidísimo, con luz a la bahía, el cual se llamaba
 8      4|           muy gacha por miedo a la luz, y los embozos del pelado
 9      4|        enrejada que las llenaba de luz, y aún sobraba algo de ella
10      4|         seguirá el improperio a la luz del día! ¡Lenguas de serpiente!
11      6|    Proclamados estos acuerdos a la luz del sol, y estampados en
12     10|          cubre con la tapa, no hay luz adentro, ni aire, y si la
13     11|            Como la tarde caía y la luz iba escaseando en aquel
14     11|       Había cierta dulzura y mucha luz en sus ojos negros; eran
15     12|          sus carnes, el poder y la luz de su mirada y las armonías
16     12|          hacendosa, y hasta con su luz; porque hubiera jurado el
17     12|        siguiente era domingo, a la luz del candil, colgado de un
18     13|       tufillo de la taberna y a la luz de los reverberos.~ ~ ¡Cuánta
19     13|             si es de día, y con la luz, si es de noche, a las lanchas
20     14|        doncella. Pero, disipada la luz de este relámpago, y examinando
21     15|          canto sobre las cejas, la luz del farol más próximo, para
22     15|       tiendas llenas de cosas y de luz, a babor y a estribor. Cleto
23     15|        alumbrados malamente por la luz de una cerilla que echó
24     15|           los rayos directos de la luz...~ ~ Y se le presentó delante
25     16|            la bahía, y a saltar la luz en manojos de centellas
26     16|         Éste sintió la puñalada de luz en lo más hondo de sí mismo;
27     16|        animación se revelaba en la luz de sus ojos valientes y
28     18|           extendiendo..., ¡y adiós luz y confianzas y regocijos!
29     18|      quería yo cogeros, a la mesma luz del sol, pa que vos alumbre
30     20|    Apolinar.~ ~ Cleto, a la escasa luz del crepúsculo, los vio
31     20|            la saya de Pachuca a la luz del candil que acababa de
32     20|            la que traigo, con esta luz que tú mesma me has encendío
33     23|        ojos de uno!... ¡a la mesma luz del megodía! ¿Es esto vergüenza,
34     25|         pobre compañera, porque la luz del candil no daba para
35     26|      ambiente tibio, y hasta en la luz de los faroles públicos
36     26|        Caminando éste detrás de la luz, vio un bulto en la oscuridad
37     26|            necesitaba, apagando la luz, que es enemiga del reposo;
38     27|   puntillas, con la palmatoria sin luz en una mano y el índice
39     28|            mañana, y no había otra luz que la tenue claridad del
40     28|       descabellada aventura.~ ~ La luz del crepúsculo comenzaba
41     28|      carrera, cuando no hallaba su luz estorbos en el espacio,
42     28|          se veía, y entonces, a la luz que sólo perciben los ojos
43     29|          se puede entrar aquí a la luz del mediodía, y toser recio
44     29|         golver... ¡Lo mesmo que la luz de Dios que nos alumbra!~ ~