Cap.

 1      2|          de Dios, y, después, cómo daba a la costa el hermoso buque,
 2      3|            bien con su hermana. La daba patadas en la barriga, o
 3      3|  importancia que esta propiedad le daba entre todo el Cabildo, en
 4      3|            la plaza (de lo cual le daba la Sargüeta una pizca mal
 5      3|         café con copa, y lo que se daba por un ochavo, y por un
 6      3|            también, siempre que le daba la gana, sino en que con
 7      6|       montón de guiñapos que se le daba por cama, con el trabajo
 8      7|          paredón del Muelle-Anaos; daba torno a cualquiera de su
 9      7|         tenía.~ ~ Mientras ésta se daba una vuelta por la cocina,
10      8|            de su oficio? ¿Quién le daba la mano? ¿Qué valedores
11      8|          de Andresillo? ¿Qué se le daba al rico comerciante, duro
12     10|            de volver Andrés, si le daba gloria ver a aquella chiquilla,
13     10|           se enteraba y de todo le daba cuenta después; y eso que
14     10|            de Silda en cuanto ésta daba media vuelta, y enseñarle
15     11|          al maestro, y éste se los daba bastante buenos; su padre,
16     11|           asco y la dentera que le daba el amargor de la aceituna.~ ~ -
17     11|           que muy de buena gana le daba tía Sidora desde que le
18     11|        gesto; tal vez porque no se daba cuenta de lo que sentía,
19     11|            despegar sus labios, se daba el botón recién pegado,
20     12|           y el contorno general no daba la corrección de los trazos
21     12|        misma tía Sidora... En fin, daba gusto estar allí donde se
22     12|      arrimado a una familia que le daba un jergón y la comida por
23     13|  Andresillo pintaba un muñeco, que daba en las vergas con la gorra.~ ~ -
24     13|       principios, con Cardona, que daba lecciones en su taller del
25     13|           de las caderas. Remando, daba torno al marinero más forzudo,
26     14|            labor de las mujeres no daba para cubrirlas todas. Andrés
27     14|  precisamente cuando a Sotileza le daba por atenderle y agasajarle
28     14|             y sabía el destino que daba el caritativo fraile las
29     15|          del pecho a cada paso que daba. Y aquel clavo era Muergo
30     16|       límites del arenal, y aún no daba señales de posar a la gentil
31     16|       peligro de vararse otra vez, daba comienzo a su particular
32     16|     imposible, porque el capote no daba para tanto lujo.~ ~ Muergo
33     17|         lección terrible. ¡Y se la daba una marinera zafia, a pesar
34     17|      anticipado algunas varas más, daba, por segunda vez, dos tremendos
35     17|        suposición: estaba por ver, daba tiempo; se vería venir,
36     19| precipitadamente.~ ~ Cada paso que daba en aquella desdichada aventura,
37     21|      fraile, con el trabajo que le daba el sermón que traía entre
38     21|         suelo.~ ~ Como Sotileza no daba lumbres, tía Sidora, algo
39     22|          agregada por el Municipio daba al espectáculo cierta apariencia
40     23|         puesto allí?... Y ¿qué más daba?~ ~ Tal miedo tenía Andrés
41     23|           contra las sacudidas que daba Sotileza a su cara para
42     25|           extremos de la barra. No daba otras señales de vida que
43     25|        porque la luz del candil no daba para tanto; y queriendo
44     25|        pide así.~ ~ Verdaderamente daba Sotileza a don Pedro Colindres
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