Cap.

 1      3|           en él imperaba. Hijo de marino y llamado a serlo, los lances
 2      7|          en perfecto carácter de «marino»; ya era... como todos.
 3      7|       mando. Como, además, era un marino consumado y un administrador
 4      8|           persiste usted en hacer marino al único hijo que tiene?~ ~
 5      8|     seguir otra carrera que la de marino. Por eso, sin salir de su
 6      8|     pregunta:~ ~ -Y si no le hago marino, ¿qué va a ser?~ ~ -Cualquier
 7      8|   cualquier perdulario que no sea marino: la vida de familia. Bien
 8      8|          tanto como la carrera de marino -se apresuró a replicar
 9      8|      imaginables en el descuidado marino que el día antes bailaba
10      8|               si después de hecho marino resulta que se marea, o
11      8| combatiendo mi propósito de hacer marino a mi hijo? De cualquier
12      9|         ponderando sus prendas de marino y su parcialidá de genio:
13      9|          a besos, que ya no sería marino. La noticia, por de pronto,
14      9|          dicho allí que iba a ser marino!...~ ~ ~
15     22|       ambos pelajes, es decir, el marino y el terrestre; entran de
16     25|    silencio. El corazón del viejo marino, aunque envuelto en corteza