Cap.

1      1|             quiero enfadarme, aunque motivos había para echaros uno a
2      3|     comprendiendo que no le faltaban motivos a la muchachuela Silda para
3      7|              de la Montañesa no tuvo motivos para arrepentirse de haberla
4     14|              ignoraba los verdaderos motivos de las alarmas de Cleto.
5     16|            nadie se acordaría de los motivos que se le aconsejaron, no
6     18| particularmente desde que había dado motivos para ellos y acababa de
7     19|             planes de Cleto, por los motivos que le zumbaban a él en
8     23|            muchas y por otros tantos motivos diferentes entre sí; de