Cap.

 1      1|     Madrid casi de continuo, todavía suelo ir de vez en cuando
 2      3|     el chico, aunque pequeño todavía, sabría defenderse y hasta
 3      5|    edad, hemos de emplearnos todavía, si V. no se opone, en algunas
 4      5|     una cana. Ni una arruga. Todavía me llaman señorito, y no
 5      7|      con el tal D. Carlitos. Todavía, si me pongo a bailar el
 6      9|   con sencillez y severidad, todavía se notaban en su traje cierta
 7     12|      que no había sospechado todavía.~ ~ Entonces, si bien con
 8     14|    haber sido Doña Blanca... todavía lo es; pero ¡hombre! ¡si
 9     19|      que mi madre nada sabe? Todavía, si es posible, hay en mí
10     23|      un hombre sin religión, todavía te tiene por caballero,
11     24| siempre, el que más me duele todavía, es el tener que despreciar
12     29|    una pena muy viva, porque todavía la amaba; pero, por otro