Cap.

 1      2|          menudo cierto barniz de dulce melancolía.~ ~ El rasgo
 2      8|      completo, brotaban de ellos dulce fuego y luz viva. Todo en
 3      8|   contempló de un modo extraño y dulce, y tomando su semblante
 4     17|          la vida de este débil y dulce compañero que el cielo me
 5     22|         pesar de la benignidad y dulce condición de Clara, D. Fadrique
 6     25|       Antonia y vivía en santa y dulce paz con su hija, a quien
 7     25|    quedado entornada, y dijo con dulce ansiedad.~ ~ -Tío, ¿qué
 8     26|    muertas; pero este perdón tan dulce le hacía más daño que las
 9     26|             Soy yo, tío -dijo la dulce voz de Lucía - . Tengo que
10     30| acostumbró de tal suerte a aquel dulce magisterio, que el día en
11     30|       nuevo. El Comendador, a la dulce y escasa luz de los astros,
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License