Cap.

1      6|      muchacho que prefiguraba a Cristo; pero el tío Gorico paraba
2     11|       en la calle la de Dios es Cristo y contestar a su mujer lo
3     14|     cuadraba el refrán de a mal Cristo mucha sangre, era la única
4     19|     merecedora de ser esposa de Cristo. En esto no he variado,
5     23|       por la pasión y muerte de Cristo te suplico que te calmes
6     27| burlarme de mi madre y hasta de Cristo, a quien he dado palabra
7     27|  preferido a todo ser esposa de Cristo; pero me consideraba indigna.
8     27|      que antes de ser esposa de Cristo, he pensado en la infinita