221. Uno debe liberarse
del odio. Uno debe abandonar el orgullo. Uno debe despojarse de todas las
ataduras. El sufrimiento no toma al que controla la mente, el cuerpo y sus
pasiones.
222. A aquel que refrena
el enfado que surge, de la misma manera que el que controla una cuadriga
tambaleante, a ése llamo yo conductor. Los demás aguantan meramente las riendas
.
223. Conquista al hombre
airado mediante el amor; conquista al hombre de mala voluntad mediante la
bondad; conquista al avaro mediante la generosidad; conquista al mentiroso
mediante la verdad.
224. Uno debe decir la
verdad y no ceder a la ira; si nos piden, hay que dar, aunque se posea poco;
por medio de estas tres cosas, uno se hace merecedor de ir a la presencia de
los dieses.
225. Aquellos sabios que
son inofensivos y siempre se controlan corporalmente van a un estado sin
muerte, donde residen sin ningún sufrimiento .
226. Se destruyen todas
las contaminaciones de aquellos que siempre están vigilantes, que se
autodisciplinan día y noche y que se esfuerzan totalmente en alcanzar el
Nibbana.
227. El que sigue es un
hecho de siempre, Atula: culpan al que permanece en silencio, culpan al que
habla mucho y culpan al que habla moderadamente. No dejan a nadie en el mundo
sin culpar.
228. No hubo nunca, ni
habrá, ni hay ahora nadie, que pueda encontrarse en este mundo que deje de
culpar o elogiar a otros.
229. La sabiduría brota
en aquel que se examina día a día, cuya vida es intachable, inteligente,
arropado con el conocimiento y la virtud.
230. ¿Quién podría culpar
al que es como una pieza de refinado oro ? Incluso los dioses lo elogian; aun
Brahma lo elogia.
231. Uno debe refrenar la
mala conducta del cuerpo y controlarlo. Abandonando la mala conducta del
cuerpo, uno debe adiestrarse en su buena conducta.
232. Uno debe refrenar la
mala conducta del habla y controlarla. Abandonando la mala conducta del habla,
uno debe adiestrarse en su buena conducta.
233. Uno debe refrenar la
mala conducta de la mente y controlarla. Abandonando la mala conducta de la
mente, uno debe adiestrarse en su buena conducta.
234. Los sabios se
controlan en actos, en palabras y en pensamientos. Verdaderamente se controlan
bien.
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