Capitulo

1         I| tragedia, suele aplicar el oído a las cerraduras del calabozo
2       III|   cimas del Etna; yo le he oído despidiendo ideas tonantes
3        VI|  de Cicerón jamás se había oído una catilinaria más tremenda,
4       VII|  el norte de África. Yo he oído a los pilotos de nuestras
5      VIII| los humanos dolores; yo he oído a Dios en los conciertos
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License