Capitulo

 1       III|      había hecho, no, al grande hombre infeliz, ni para la victoria,
 2       III|            Y, sin embargo, este hombre, tan ardoroso y valiente,
 3       III|     generaciones anteriores. El hombre que se compromete a hacer
 4       III|    imaginara encontrar en él un hombre distinto. La defensa nacional
 5       III|     victoria. Diríase que aquel hombre vencía, por un milagro de
 6       III|        republicana francesa. El hombre muere; la humanidad es inmortal.~ ~
 7       III|    Acordaos de Mirabeau. No hay hombre que haya combatido como
 8       III|         haya combatido como ese hombre. Así, la naturaleza lo ha
 9       III|    fórmulas eternas lo pensado; hombre de mundo que va de las asambleas
10       III|        los salones a los clubs; hombre de sentimientos que necesita
11       III|        la amistad como el amor; hombre de Estado que prevé y calcula
12       III|       virtudes como ningún otro hombre; filósofo y orador, había
13        IV|         parientes del siniestro hombre de la fatalidad y del destino.
14        IV|       por el orgullo de un solo hombre, y decidme luego si ese
15        IV|          y decidme luego si ese hombre, levantado sobre montañas
16        IV|      infame soberbia.~ ~¡Y este hombre ha sido llamado el hombre
17        IV|       hombre ha sido llamado el hombre de la revolución! ¡No, mil
18        IV|           No, mil veces no! Ese hombre es como Juliano en el Cristianismo;
19         V|        general. No ha nacido un hombre de su temple para mirar
20       VII|  variedad infinita. Despojad al hombre del hogar en que habita,
21       VII|         grado, y no se rinde al hombre como no la venza y sujete
22       VII|         Tabores de sus artes al hombre moderno; el indio histórico,
23      VIII|    mujer, pertenecía de suyo al hombre; y toda la parte audaz y
24      VIII|   hubiérase dicho pertenecer al hombre, pertenecía de suyo a la
25      VIII|     como una gran pesadilla. El hombre aquel, en quien pusiera
26      VIII|     pertenecía seguramente a un hombre de la previsión por todos
27      VIII|        genera en sus teorías al hombre mismo por el ayuntamiento
28      VIII|     izquierda extrema existe un hombre con autoridad extraordinaria,
29      VIII| conservadora, encabezada por un hombre de suyo eminente, como el
30        IX|     cielo y por las cóleras del hombre allá en las orillas del
31         X|   devorado en sus entrañas, ese hombre no quita ni añade un ápice
32         X|         generosidad natural del hombre como un nimbo místico sobre
33        XI|        una imagen siniestra, un hombre que ocultaba su cabeza bajo
34        XI|     desprecio. ¿Y quién era ese hombre? Pues era nada menos que
35      XIII|       más razón que al morir un hombre no ha muerto tanto su persona
36       XVI|       de Dios algo humano y del hombre algo eternal y etéreo en
37       XVI|        tanto el artista como el hombre. Tourguenieff no pertenece
38      XVII|        fuerza. La condición del hombre, mirada en los lejos de
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