Libro, Capítulo

  1    1,      II|        tierra, abrazándose con el agua, hacen un globo o bola cabal,
  2    1,     III|          rodeada del elemento del agua, dice galanamente: que asentó
  3    1,     III|  sentencia de fe, que la tierra y agua hacen un globo en medio
  4    1,     III|    estribos de la tierra, sino el agua, la cual, con ser tan fácil
  5    1,     III|         la tierra está debajo del agua, que no sobre el agua, porque
  6    1,     III|         del agua, que no sobre el agua, porque a nuestra imaginación
  7    1,     III|          ternán? Y si la tierra y agua hacen una bola redonda, ¿
  8    1,     III|         la máquina de la tierra y agua, cuando se figura estar
  9    1,      VI|         dos elementos de tierra y agua componen un globo o bola
 10    1,      VI|          tierra descubierta y sin agua.~ ~Dice bien, sin duda,
 11    1,      VI|          del mundo la tierra y el agua se están como abrazando,
 12    1,    XVII|         Sabio: 96 la nao corta el agua y sus ondas, sin dejar rastro
 13   II,      VI|         que la tórrida zona tiene agua, y no es seca, lo cual es
 14   II,      VI|          la hondura y anchura del agua; ni se pasa en barcas, por
 15   II,      VI|        paja echada sobre la misma agua, que, por ser materia tan
 16   II,     VII| alquitaras y alambiques que sacan agua de hierbas o flores, porque
 17   II,     VII|      hallar salida, los vuelve en agua y licor. La misma filosofía
 18   II,     VII|          apretados, se vuelven en agua. Porque aquel tiempo de
 19   II,     VII|          se derriten y vuelven en agua.~ ~Lo cual todo se entiende
 20   II,       X|            Porque el elemento del agua es de su naturaleza frío,
 21   II,       X|      naturaleza frío, y aunque el agua por la fuerza del fuego
 22   II,       X|           caliente que parezca el agua que llueve, en fin, se bebe
 23   II,       X|     nuestros, habiendo penuria de agua para beber. De suerte que,
 24   II,      XI|      porque, aunque es salobre su agua, en fin es agua, y el agua
 25   II,      XI|        salobre su agua, en fin es agua, y el agua de suyo fría,
 26   II,      XI|        agua, en fin es agua, y el agua de suyo fría, y esto es
 27   II,      XI|       océano no da lugar a que el agua se caliente con el fervor
 28   II,      XI|        sal, sirve para enfriar el agua, así también vemos por experiencia
 29   II,      XI|      vemos por experiencia que el agua de la mar refresca, y así,
 30   II,      XI|          visto poner a enfriar el agua o vino para beber en frascos
 31   II,     XII|        proceder, y si procede del agua y tierra, conforme a razón,
 32   II,    XIII|        cierto donde el cielo y el agua son de una misma suerte,
 33  III,      II|         los tres elementos, aire, agua y tierra, y los compuestos
 34  III,      VI|     primer móvil. El elemento del agua tampoco tiene este movimiento
 35  III,      IX|         naturalmente enturbian el agua de la mar, y la ponen verdinegra:
 36  III,      IX|          se ofrece considerar del agua.~ ~
 37  III,    XIII|           ríos y grandes de linda agua. Hay maravillosas arboledas
 38  III,     XIV|           es movimiento local del agua del mar, de suerte que el
 39  III,     XIV|         del mar, de suerte que el agua que viene creciendo a una
 40  III,     XIV|         una caldera hace ondas el agua, que es llano que, cuando
 41  III,      XV|         habita de ordinario en el agua, y por eso le comen por
 42  III,      XV|          la fiesta, no llegaba al agua la carne del rocín, sino
 43  III,      XV|           la presa hace fuera del agua, y en ella ahoga lo que
 44  III,      XV|           lo traga sino fuera del agua, porque tiene el tragadero
 45  III,      XV| fácilmente se ahogaría entrándole agua.~ ~Es maravilla la pelea
 46  III,      XV|           gran fuerza llevarle al agua; el tigre hacía fuerte presa
 47  III,      XV|          y se lo metió debajo del agua, de que el indio lastimado
 48  III,      XV|          no prende sino fuera del agua, por debajo de la barriga
 49  III,      XV|          mar, y levanta montes de agua, y húndese dentro con furia,
 50  III,      XV|            mientras está en mucha agua, da vueltas a una parte
 51  III,      XV|      Neptunos que pintan sobre el agua. En llegando a tierra, sacan
 52  III,      XV|          se zambullían debajo del agua, y nadando con admirable
 53  III,     XVI|         que hubo en la laguna. El agua no es del todo amarga y
 54  III,     XVI|            De patos y patillos de agua hay innumerable cosa en
 55  III,     XVI|      menguar, que todo arguye ser agua manantial, que la naturaleza
 56  III,     XVI| nacimiento de alguno de ellos. El agua de estos lagos es limpia
 57  III,     XVI|           sale frigidísima, es el agua calidísima. Suelen nadar
 58  III,     XVI|          metal, y siendo tanta el agua que desagua, había de menguar
 59  III,     XVI|        gracioso, y en él baños de agua caliente, y mana allí, que
 60  III,     XVI|          fundadas sobre la propia agua, y hechos sus camellones
 61  III,    XVII|           hay una fuente que mana agua caliente, y como va manando
 62  III,    XVII|    caliente, y como va manando el agua se va convirtiendo en peña.
 63  III,    XVII|        liviana y durable. De esta agua, si beben hombres o animales,
 64  III,    XVII|        convirtiendo en piedra, el agua que va manando tapa el camino
 65  III,    XVII|           el Inga hay un canal de agua, que sale hirviendo, y junto
 66  III,    XVII|   hirviendo, y junto a él otro de agua tan fría como de nieve.
 67  III,    XVII|           de las Charcas, en cuya agua no se puede sufrir tener
 68  III,    XVII|         es de la misma manera que agua de lejía, la color cenicienta,
 69  III,   XVIII|   terrible profundidad, adonde el agua con el gran golpe hace tales
 70  III,     XIX|       ciénagas que, como corre el agua de los altos, muchas veces
 71  III,      XX|            aunque a veces cae una agua menudilla, que ellos llaman
 72  III,      XX|           a unos goteroncillos de agua que cae; pero, en efecto,
 73  III,      XX|         efecto, no hay tejados ni agua que obligue a ellos. Los
 74  III,     XXI|          cercanos a ríos, de cuya agua trascolada se hallan pozos,
 75  III,     XXI|      sazón; porque, aunque tengan agua de pie cuanta quieran sacada
 76  III,     XXV|        vaporosa, y convertirla en agua, y esas son fuentes que
 77  III,     XXV|       atraen así la materia de el agua; así también hay lugares
 78  III,    XXVI|      tierras marítimas que tienen agua vecina. Y así se ve en Europa
 79  III,    XXVI|      aquella playa, nadando en el agua que dije las vigas y madera
 80  III,    XXVI|          mi parecer es que con el agua se tapan y obstruyen los
 81  III,    XXVI|      legua y media, como si fuera agua o cera derretida, de modo
 82  III,   XXVII|  juntándolo con el precedente del agua, cuyo orden y trabazón entre
 83  III,   XXVII|         En unas partes combate el agua a la tierra furiosamente
 84   IV,      IV|         por donde ha pasado mucha agua. Abundan los ríos de Indias
 85   IV,      IV|  lavaderos, lavándolo mucho en el agua, hasta que el arena o barro
 86   IV,      IV|      azogue; también se apura con agua fuerte, porque el alumbre,
 87   IV,       V|         de oro se deslizan con el agua, como es más común opinión
 88   IV,       V|    diluvio sucedió hallarse en el agua el oro en partes tan extrañas
 89   IV,      VI|           color gastada del sol y agua, y llevólos a Porco a ensayar
 90   IV,     VII|        espacio tan largo sacan el agua los gascones por el tiempo
 91   IV,     VII|         todo este espacio sacaban agua, que es el mayor impedimento
 92   IV,     VII|    profundidad, nunca han dado en agua que es la mayor felicidad
 93   IV,     VII|    beneficiar por el fastidio del agua en que han dado, porque
 94   IV,     VII|       porque cavar peñas, y sacar agua, son dos trabajos insufribles
 95   IV,       X|         fuera palo o corcho en el agua. Plinio hace excepción diciendo, 163
 96   IV,     XII|         en sí, como la esponja al agua, incorporándola consigo
 97   IV,     XII|         el metal en unas tinas de agua, donde con unos molinetes
 98   IV,     XII|        unos molinetes o ruedas de agua, trayendo al derredor el
 99   IV,     XII|      barro o lama del metal en el agua que corre, y la plata y
100   IV,     XII|         en unas balsas o pozas de agua, y allí acaba de caerse
101   IV,     XII|        hornos, y, finalmente, por agua y fuego.~ ~Digo esto porque,
102   IV,    XIII|           mueven con el golpe del agua, como aceñas o molinos;
103   IV,    XIII|        gran cantidad. Y porque el agua, que comúnmente es la que
104   IV,    XIII|         alzan y sale un cuerpo de agua, y las fiestas las cierran.
105   IV,    XIII|            y el año es copioso de agua, dura la molienda seis o
106   IV,    XIII|       cuarenta y ocho ingenios de agua, de a ocho, diez y doce
107   IV,    XIII|      ingenios, todos éstos son de agua; fuera de los cuales hay
108   IV,      XV|        tienen dentro. El frío del agua allá dentro del mar es grande,
109   IV,     XVI|      arroz, también cocido con su agua caliente. Algunas veces
110   IV,    XVII|           y raspa; humedécese con agua o caldo fácilmente, y para
111   IV,    XVII|           maravilla que el zumo o agua que exprimen de aquella
112   IV,    XVII|   salserillas, así caliente en su agua, lo van mezclando con la
113   IV,    XVII|       cuasi la tierra empapada en agua y empantanada. En Europa,
114   IV,     XIX|           y echándolas un rato en agua y sal. Algunos tienen opinión
115   IV,     XXI|           planta que quiere mucha agua, y cuasi continua. Lo cual
116   IV,   XXIII|      escribir milagros, de que da agua y vino y aceite y vinagre
117   IV,   XXIII|         un licor que se bebe como agua, y es fresco y dulce; este
118   IV,    XXIX|            y luego se hunde en el agua; de éste trajo la flota
119   IV,     XXX|           una botija o cántaro de agua, y sirven para edificios,
120   IV,   XXXII|     terreno esponjoso y chupar el agua de ríos que bajan de la
121   IV,   XXXII|          por el arena hace que el agua no sea estéril y inútil,
122   IV,    XXXV|           sufren estar debajo del agua, porque su respiración es
123   IV,    XXXV|        quizá dejándose caer en el agua cuando están fatigadas de
124   IV,  XXXVII|         dicen ser la causa que el agua con que riegan estos árboles
125   IV, XXXVIII|          ambiguo, porque andan en agua, y sálense a tierra, y súbense
126   IV, XXXVIII|         que están a la orilla del agua, y lanzándose de allí al
127   IV, XXXVIII|           y lanzándose de allí al agua las cogen poniéndoles debajo
128   IV,     XLI|        recuas), donde hay pasto y agua; allí descargan y arman
129   IV,    XLII|           los cuales empozoñan el agua y pastos que beben y comen
130   IV,    XLII|        vino, otros en vinagre, en agua de azahar, de lengua de
131    V,      VI|           procesión para alcanzar agua y buenos temporales, y les
132    V,     XVI|           con rosas y juncos, dar agua a manos a los sacerdotes,
133    V,    XVII|            llamada Ezapán, que es agua de sangre; y había gran
134    V,   XVIII|            para que no faltase el agua; y si era blanco raso, ofrecíanle
135    V,    XXIV|          que no se había de beber agua, ni otra cosa alguna sobre
136    V,    XXIV|        este ínterin, escondían el agua de los niños, y avisaban
137    V,    XXIV|         de razón, que no bebiesen agua, porque vendría la ira de
138    V,    XXVI|          en lebrillos y cercos de agua.~ ~En el Perú usaron también
139    V,   XXVII|        llaman, que era bañarse en agua, para quedar limpios de
140    V,  XXVIII|         que el hielo, el aire, el agua y el sol no dañasen a las
141    V,  XXVIII|       cien carneros; y si faltaba agua, para que lloviese ponían
142    V,    XXIX|          toda se endereza a pedir agua del cielo, al modo que nosotros
143    V,    XXIX|       tierra hay más necesidad de agua. Comenzábase su celebración
144    6,     XIV|         no parece que se mueve el agua, por abajo dicen que lleva
145    6,    XXIV|         de mar tenía estanques de agua salada, y para los de río,
146    6,    XXIV|          los de río, estanques de agua dulce; para las aves de
147    7,       V|           que les dió cercaron de agua un hermoso cerro llamado
148    7,     VII|       espeso, toparon un golpe de agua muy clara y muy hermosa
149    7,     VII|     Toparon aquel día el golpe de agua del día antes, pero muy
150    7,    VIII|     vientos. Vaya y sea señor del agua y de la tierra que posee
151    7,      IX|         hacer una sementera en el agua de varias legumbres, y así
152    7,      IX|      habían de traer por la misma agua cada año sin faltar, donde
153    7,      IX|          la sementera hecha en el agua, y llevada por el agua,
154    7,      IX|         el agua, y llevada por el agua, en la cual había mucho
155    7,      IX|       Méjico en medio de la misma agua, ternán por patraña lo que
156    7,      IX|          sementera movediza en el agua, porque sobre juncia y espadaña
157    7,      IX|       forma, que no la deshaga el agua, y allí se siembra y cultiva
158    7,      XI|         de Méjico gran penuria de agua, porque la de la laguna
159    7,      XI|       abuelo el de Azcapuzalco el agua del cerro de Chapultepec,
160    7,      XI|    estacas y carrizos, con que el agua llegó a su ciudad; pero,
161    7,      XI|     quebraba y no podían gozar su agua como deseaban y habían menester.
162    7,      XI|        resoluta, diciendo que del agua que les había hecho merced
163    7,      XI|         ajena y que les diesen su agua, querían que los fuesen
164    7,      XI|          bastimentos por tierra y agua. Tras esto les rogaron los
165    7,      XV|      laguna, y parecióles que por agua podían hacer daño a Méjico;
166    7,     XIX|          hizo Autzol fundar en el agua una como isleta hecha de
167    7,     XIX|      ciudad de Méjico gozaba poca agua y que la laguna estaba muy
168    7,     XIX|       ella un brazo gruesísimo de agua de que se servían los de
169    7,     XIX|         entendiese que, si sacaba agua de madre y la metía en Méjico,
170    7,     XIX|           caño por donde fuese el agua a Méjico, en fin salió con
171    7,     XIX|       echando grandísimo golpe de agua en su laguna, la cual llevaron
172    7,     XIX|    caracoles y haciendo música al agua, con cuya vestidura (digo
173    7,     XIX|   vestidura (digo de la diosa del agua) iba revestido el principal,
174    7,     XIX|   principal, y todos saludando al agua y dándole la bienvenida.~ ~
175    7,     XIX|          entender. Finalmente, el agua llegó a Méjico; pero fué
176    7,     XIX|         su ciudad cercada toda de agua, como otra Venecia, y muy
177    7,     XXI|     señores de ellas le sirvieron agua a manos, haciendo oficios
178    7,   XXIII|        acudió muchísima gente con agua, y nada bastó, hasta que
179    7,   XXIII|            y que ardía más con el agua.~ ~Vieron otrosí salir un
180    7,   XXVII|       gran necesidad por falta de agua, y que para que lloviese
181    7,   XXVII|          adorasen allí y pidiesen agua, y ellos lo hicieron así.
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