Libro, Capítulo

 1    1,       I|        razón de esto, que de otra suerte estuviera la tierra en medio
 2    1,      VI|        ella, antes hay tierra, de suerte que a todas partes del mundo
 3    1,     VII|        ver que se pudiese de otra suerte el mundo hacer; siendo verdad,
 4    1,    VIII|          mar océano, pues de otra suerte no es posible haber allá
 5    1,      IX|      aquella tierra, pues de otra suerte no dijera el profeta Sofonías, 57
 6    1,      XI|          filósofo. 62 Ser de otra suerte lo uno y lo otro, ya está
 7    1,    XIII|          de vocablos, pues de esa suerte también diríamos que Yucatán
 8    1,      XV|         entendamos la Iglesia. De suerte que el Espíritu Santo, por
 9    1,   XVIII|      navegaron de él, fué de otra suerte, que lo que el día de hoy
10    1,    XXIV|    podemos creer, que unos de una suerte, y otros de otra se vinieron
11   II,      IV|      mundo nuevo pasa de la misma suerte; de lo cual es testigo todo
12   II,       X|    penuria de agua para beber. De suerte que, así la razón como la
13   II,     XII|           veces del todo; y es de suerte el frío que allí hace, que
14   II,     XII|     hallamos que nos refresca; de suerte, que afirman estos autores
15   II,    XIII|          el agua son de una misma suerte, no se puede pensar otra
16  III,      II|        que no se puede de ninguna suerte decir que ésta sea toda
17  III,      IV|           y de allí a Sevilla. De suerte que la ida es en poca altura,
18  III,      IV|           donde habían salido. De suerte, que en esta navegación
19  III,       V|         el mismo círculo. De esta suerte resultan ocho diferencias
20  III,    VIII|       porque en tierra es de otra suerte, en la cual se hallan todos
21  III,      IX|           a veces se encalman, de suerte que no hay espuelas que
22  III,      IX|  airecillo no recio, y penetra de suerte que caen muertos cuasi sin
23  III,      IX|           se mantenían de aquella suerte, ya se habían acabado todos,
24  III,      XI|       hacia levante, pues de otra suerte no fuera posible dejar de
25  III,     XIV|        local del agua del mar, de suerte que el agua que viene creciendo
26  III,     XIV|     Respondióme que no era de esa suerte, sino que, clarísimamente,
27  III,      XV|      porque tiene el tragadero de suerte que fácilmente se ahogaría
28  III,      XV|           la barriga le hirió, de suerte que el caimán se salió herido
29  III,     XIX|          costa del mar es de esta suerte en Indias, mayormente por
30  III,     XIX|         los antiguos pensaron. De suerte que, cuando van de Europa
31  III,     XXI|        abriga aquellos llanos, de suerte que no deja soplar viento
32  III,   XXIII|       diferencia en su cuenta: de suerte que en Macán es domingo
33  III,   XXVII|        grande admiración. De esta suerte me dijo un piloto experto
34   IV,       I|        descubrille, sentido.~ ~De suerte, que la tierra estéril y
35   IV,      IV|      mitad piedra. El oro de esta suerte se halla en pozos y en minas,
36   IV,      VI|          grados y dos tercios, de suerte que cae dentro de los trópicos,
37   IV,    VIII|        repartiendo el trabajo, de suerte que unos labran de día,
38   IV,   XVIII|     cundido en algunas partes, de suerte que me afirman que, para
39   IV,     XIX|         en su planta, que de otra suerte no podía venir: el olor
40   IV,     XIX|       valle de Ica en el Perú, de suerte que se hace cepa la raíz
41   IV,      XX|    Española, y ha multiplicado de suerte que ya no saben qué hacerse
42   IV,     XXI|           la sombra que hacía; de suerte que no había más sol debajo
43   IV,     XXI|          otro retoña de nuevo; de suerte, que siempre suceden unos
44   IV,   XXIII|       planta de éstas; pero no de suerte que haya que hacer caso
45   IV,  XXXIII|         en muchas partes; y es de suerte la franqueza de pastos y
46   IV,  XXXIII|          número y en grandeza, de suerte que es plaga de aquella
47   IV, XXXVIII|          espinazo, porque de otra suerte dentro de un día se corrompen.~ ~
48   IV,   XXXIX|          del otro y hacer de esta suerte una como cadena de muchos;
49    V,      II|    lisonja adoran los hombres. De suerte, que por todas contamos
50    V,      XV|          de doncellas que de otra suerte no podían ser recibidas,
51    V,     XIX|    degollar a su hijo, de ninguna suerte lo consintió. De donde se
52    V,      XX|    sacrificado, se doblaba de tal suerte, que dejando caer el cuchillo
53    V,      XX|           gradas abajo. Y de esta suerte sacrificaban todos los que
54    V,     XXI|   cautivos para el sacrificio, de suerte, que en estas batallas más
55    V,     XXI|      primero alguna provincia, de suerte que trajese gran número
56    V,    XXIX|          cosas. Compuesto de esta suerte, quitaban la cortina de
57    6,       I|     gobierno antiguo, muy de otra suerte lo juzgan, maravillándose
58    6,      II|      siendo cada una de trece, de suerte que eran por todos cincuenta
59    6,       V|           francés le llama de una suerte, y el español de otra. De
60    6,    VIII|          efecto; pues verles otra suerte de quipos, que usan de granos
61    6,      IX|          iban subiendo, y de esta suerte iban en la cuenta de los
62    6,       X|          fuesen muy alentados, de suerte que pudiesen subir una cuesta
63    6,      XI|       primeros oficios.~ ~De esta suerte se gobierna la mayor parte
64    6,      XI|       vulgo de los demás. De esta suerte pasa en toda la tierra de
65    6,    XIII|          no podían entrar de otra suerte. Todo el reino estaba dividido
66    6,    XIII|      posibilidad de la tierra, de suerte que ya se sabía para cumplir
67    6,      XV|           la religión y ritos, de suerte que el Pachayachacic, que
68    6,    XXIV|          por detrás derribada, de suerte que no era del todo redonda,
69    6,  XXVIII|        Estaban ambos templados de suerte que hacían entre sí buena
70    7,       I|       nuestro pequeño trabajo, de suerte que salga a gloria de su
71    7,       V|    atajasen un río muy grande, de suerte que se derramase por un
72    7,       V|           y hasta los Chalcas, de suerte que con mano armada vinieron
73    7,      VI|          ropas de ella, y de esta suerte le pusieron junto al ídolo,
74    7,    VIII|          multitud, que te cupo en suerte, y de toda esotra gente
75    7,      IX| empollados, y que había de ser de suerte que, cuando llegasen, habían
76    7,      IX|           no había de ser de otra suerte, so pena de incurrir en
77    7,     XII|        suyos le embravecieron, de suerte que la respuesta fué de
78    7,      XV|         apretó a sus enemigos, de suerte que les hizo huir, y yendo
79    7,     XVI|           y aparato, ropa de toda suerte, cacao, oro, plata, plumería
80    7,   XVIII|       iban huyendo revolvieron de suerte, que tomaron en medio a
81    7,      XX|            dicen se enterneció de suerte que, acometiendo a responder
82    7,   XXVII|        Señor maravillosamente, de suerte que ellos se admiraban de
83    7,  XXVIII|         fruto, y en otros de otra suerte, de principios más dichosos,
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License