Libro, Capítulo

 1    1,       I|       los rayos con su rueda.~ ~Van con este parecer de Crisóstomo
 2    1,      VI|     Beata, y las demás. Y éstas van corriendo por su orden hasta
 3    1,     VII|         y motivos de su opinión van por muy diferentes caminos,
 4    1,     VII|  trasponen, y levantarse cuando van al medio día; y que la tierra
 5    1,      XV|        las alas de las naos que van de la otra parte de la Etiopía!
 6   II,      II|         consiguiente las que se van más llegando al sol, y son
 7   II,      IV|       nieves, parte de lluvias, van hinchendo aquellas grandes
 8   II,      IV|          procede el Nilo; y así van poco a poco ensanchando
 9   II,      VI|      Margarita y Trinidad. Pero van tan extendidas sus riberas,
10  III,      IV| Mediterráneo a Italia, donde se van reconociendo a ida y vuelta
11  III,      IV|        se valen del remo; y así van y vienen galeras costeando.~ ~
12  III,      IV|  vientos. Pasadas las Canarias, van bajando hasta entrar en
13  III,      IV|    flotas se dividen; y las que van a Nueva España echan a mano
14  III,      IV|     Firme toman la izquierda, y van a reconocer la altísima
15  III,      IV|      Habana, juntas las flotas, van la vuelta de España buscando
16  III,      VI|    tiempo uniforme, y las velas van con igualdad extraña, sin
17  III,      XV|       ellos saltan de la mar, y van buen pedazo por el aire;
18  III,      XV|         de un lado y de otro se van una y dos leguas en alta
19  III,     XVI|     copia de balsas, y en torno van persiguiendo y encerrando
20  III,    XVII|         otros semejantes; y así van allí a cobrar salud de partes
21  III,   XVIII|        asidos con unas cuerdas, van nadando y tirando de la
22  III,   XVIII|         carroza, y otros detrás van dando empellones a la balsa
23  III,     XIX|         y aún quieren decir que van en crecimiento los indios,
24  III,     XIX| pensaron. De suerte que, cuando van de Europa a Indias, se maravillan
25  III,   XXIII|      por relación fresca que se van descubriendo grandes provincias
26  III,   XXIII|  navegan de occidente a oriente van siempre ganando día, porque
27  III,   XXIII|   oriente a poniente, al revés, van siempre perdiendo día o
28  III,   XXIII|    tarde, y según lo que más se van llegando a oriente o a poniente,
29  III,   XXIII|  occidental respecto de España, van más de seis horas traseros,
30  III,   XXIII|          como he dicho, los que van al nacimiento del sol, van
31  III,   XXIII|      van al nacimiento del sol, van contando el día más temprano,
32  III,   XXIII|  saliendo más presto; y los que van al ocaso, al revés, van
33  III,   XXIII|         van al ocaso, al revés, van contando el día más tarde,
34  III,   XXIII|        los días, y como los que van navegando a oriente o poniente
35  III,   XXIII|  navegando a oriente o poniente van mudando meridianos sin sentirlo,
36  III,   XXIII|      sentirlo, y por otra parte van prosiguiendo en la misma
37  III,     XXV|        opinión que los volcanes van gastando la materia interior
38   IV,       I|     discurso de tiempo largo se van acrecentando, y cuasi propagando.
39   IV,    VIII|         que son unas cuevas que van hechas por bajo desde un
40   IV,    VIII|        cuenta, aunque las minas van tan hondas, les falta otro
41   IV,     XII|     azogue como un rocío, y así van revolviendo el metal para
42   IV,     XIV|         en la misma piedra, que van haciendo como veta, y, según
43   IV,     XIV|    según parece, poco a poco se van cuajando y afinando, porque
44   IV,    XVII|         caliente en su agua, lo van mezclando con la vianda.
45   IV,     XXI|         de la cepa del plátano, van siempre brotando pimpollos,
46   IV,    XXII|      carneros de la tierra, que van con esta mercadería a manadas,
47   IV,   XXIII|         que arrope de uvas. Así van cociendo estas y otras diferencias
48   IV,   XXIII|        el cabo; salvo que, como van saliendo hojas arriba o
49   IV,   XXIII|      los lados, las de abajo se van engrosando, y llegan cuasi
50   IV,    XXVI|        mayores ramas cuanto más van subiendo. Estas palmas o
51   IV,    XXIX|     debajo de la línea. Allí se van muchos a curar, y es opinión
52   IV,  XXXIII|     comer por dárselo; y cuando van camino los llevan consigo
53   IV,    XXXV|       que muchas pasan la mar y van a regiones muy extrañas,
54   IV,    XXXV|       carneros de la tierra que van cargados. Pero dejando estas
55   IV,  XXXVII|         de pájaros marinos, que van allí contino a estercolar.
56   IV,  XXXVII|         fabulosa. A estas islas van barcas a sólo cargar de
57   IV,     XLI| carneros cargados como recua, y van en una recua de éstas trescientos
58    V,       V|         los adoran. Usan cuando van de camino, echar en los
59    V,     XVI|     monasterios de estos monjes van de ordinario los mandarines
60    V,    XVII|    persuasión de el demonio, se van a sierras muy agrias, y
61    V,     XXV|         la gracia del Señor, se van desengañando del todo, y
62    V,    XXVI|        la figura que quieren, y van por el aire en breve tiempo
63    V,    XXVI|      los perlados y sacerdotes, van siendo menos y no tan perjudiciales.
64    6,      VI|         tablado, ni quien mire: van saliendo personajes y escenas
65    6,    VIII|         dos y tres años, cuando van a tomar residencia a un
66    7,      XI|      cosas sin consideración no van bien guiadas, ni tienen
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License