Libro, Capítulo

 1    1,      II|       Sur, acá en el Pirú. Basta finalmente haber corrido navegando
 2    1,     III|      están aseguradas sus bases? Finalmente, para que se acabase de
 3    1,     III|        bramando en su combate; y finalmente, cualesquiera obras de naturaleza,
 4    1,    VIII|     Macrobio, y Pomponio Mela, y finalmente fué el común parecer de
 5    1,    XIII|         podían engolfarse tanto. Finalmente, en estas cosas, cuando
 6    1,     XVI|         camino que habían hecho. Finalmente, iban por su tino, como
 7    1,   XXIII|       sus ceremonias, su Mesías, finalmente todo su judaísmo? Lo que
 8   II,      IV|        se vuelve a acercar allá; finalmente pasa al pie de la letra
 9   II,       X|   Andalucía, por julio y agosto, finalmente responderé que la razón
10   II,      XI|      otras también muy frías, y, finalmente, no siendo uno el temple
11   II,      XI|     calientan las aguas de ríos. Finalmente, como el salitre, con ser
12   II,     XIV|   saludable, repara las fuerzas; finalmente, sólo el aire podemos decir
13  III,      IV|         las brisas, o nordestes. Finalmente, ya es regla, y observación
14  III,       V| doscientos y cincuenta y seis; y finalmente, ir multiplicando estas
15  III,      VI|         encumbrando y bajando; y finalmente, dando vuelta a nuestro
16  III,      IX|        que el estómago sentía.~ ~Finalmente digo, que si aquello durara,
17  III,      IX|         en otra por los Cabanas; finalmente, por cuatro partes diferentes
18  III,      IX|       dolor en los pies o manos; finalmente, es exterior su operación:
19  III,     XII|   también, refería, concluyendo, finalmente que, a la sabiduría del
20  III,     XIX|         mejor del Nuevo Reino.~ ~Finalmente, tengo por gran acuerdo
21  III,   XXIII|       les va saliendo más tarde. Finalmente, la diversidad de los meridianos
22  III,    XXVI|     calles, o plazas, o huertas, finalmente, a lo descubierto. Y así,
23   IV,     III|        la Sierra algodón tejido. Finalmente, su modo de contratar de
24   IV,     VII|       basta el primero, y sobra. Finalmente, el día de hoy tiene la
25   IV,     XII|        exprimideros y hornos, y, finalmente, por agua y fuego.~ ~Digo
26   IV,    XIII|          de sacar plata. La cual finalmente se ensaya y prueba por los
27   IV,     XXI|          medran ni valen nada.~ ~Finalmente, lo mismo en que hay la
28   IV,    XXXI|    garbanzos, habas, lentejas y, finalmente, cuanto por acá se da de
29   IV,    XXXV|         ellos como de palomas.~ ~Finalmente, las aves con sus alas tienen
30   IV,    XXXV|        hechos de paja o de palo. Finalmente, en Indias hay muchas especies
31    V,      IV|      Minerva, y de Marte, etc.~ ~Finalmente, quien con atención lo mirare,
32    V,       V|       por cosa de gran devoción; finalmente, cualquiera cosa de naturaleza
33    V,    VIII|     hermanos y de los referidos. Finalmente mataban a todos los de su
34    V,   XVIII|         chicha por superstición. Finalmente, de todo cuanto sembraban
35    V,     XXV|         saliendo, de manera, que finalmente queda toda en el aire, y
36    V,     XXV|      balanza un poco, hasta que, finalmente, habiendo dicho todos sus
37    V,    XXIX|          de maíz y codornices y, finalmente, todo lo que en semejantes
38    V,    XXXI|        lo bueno y corrompello.~ ~Finalmente, quien viere la ceguedad
39    6,       V|         o que el día es del sol: finalmente, los casos, conjunciones,
40    6,    VIII|         azules, otros blancos, y finalmente tantas diferencias, que
41    6,      IX|     hasta la vuelta de la rueda. Finalmente, todas cuatro diferencias
42    7,      VI|         y después a Iztacalco, y finalmente al lugar donde está hoy
43    7,      XV|          a los montes y rendirse finalmente cruzadas las manos.~ ~Volvió
44    7,     XVI|          victorias había habido. Finalmente, gozando de grande prosperidad
45    7,     XIX|     jamás había podido entender. Finalmente, el agua llegó a Méjico;
46    7,     XXI|    reputación ganaban los reyes. Finalmente, se resolvió de modo, que
47    7,  XXVIII|         su espada le degüella.~ ~Finalmente, quiso nuestro Dios (que