Libro, Capítulo

 1    1,      IX|        me traerán presentes los hijos de mis esparcidos, que así
 2    1,     XIV|  Melithi, y despojó a todos los hijos de Tarsis y a los de Ismael,
 3    1,      XV|         de este ejército de los hijos de Israel, todas las cosas
 4    1,      XV|         de este ejército de los hijos de Israel cananeos hasta
 5    1,      XV|     Sefarad, nos signifique los hijos de la santa Iglesia, que
 6  III,      XV|       animal que pare vivos sus hijos, y tiene tetas, y leche
 7    V,       I|     alto, y que entre todos los hijos de soberbia él es el rey.
 8    V,     III|      por tenerlos en opinión de hijos del cielo y como divinos,
 9    V,    XVII|      Beelfegor sacrificaban sus hijos e hijas; 228 y los pasaban
10    V,     XIX|       es sacrificar sus propios hijos, o hacer otros sacrificios
11    V,     XIX|         llegar a sacrificar sus hijos y hijas a los demonios,
12    V,      XX|    matar niños y sacrificar sus hijos los del Perú se aventajaron
13    V,    XXIV|        demonio, príncipe de los hijos de soberbia ordenó en Méjico,
14    V,     XXV|       cuando están enfermos sus hijos, o mujeres, o maridos, o
15    V,     XXV|    morírsele a algún hombre sus hijos, le tenían por gran pecador,
16    V,   XXVII|    hacía principalmente con los hijos de los reyes y señores;
17    V,   XXVII|  izquierda una rodelilla. A los hijos de la gente vulgar les ponían
18    V,   XXVII|      daban las hijas y a él los hijos. Mandábanles estrechamente
19    6,       V|        de los padres en que sus hijos aprendan a leer y escribir.
20    6,     XIV|         éstos, que bien parecen hijos del sol.~ ~Las puentes que
21    6,      XV|  persona y la de su mujer y sus hijos, y así era unos años más,
22    6,      XV|      hilar y tejer su ropa para hijos y mujer, y había visita
23    6,   XVIII|       su muerte mandó que estos hijos suyos, hermanos de padre
24    6,    XXII|    dignos de crédito, que entre hijos y nietos tenía en el Cuzco
25    6,   XXVII|        y orden que en criar sus hijos tenían los mejicanos; porque,
26    6,   XXVII|           dieron en apartar sus hijos de regalo y libertad, que
27    6,   XXVII|      mismos recogimientos otros hijos de señores y gente noble,
28    6,   XXVII|       que de ordinario eran los hijos de gente noble y valerosa,
29    6,   XXVII|      los mejicanos en criar sus hijos, y si agora se tuviese el
30    6,   XXVII|         su perdición hacían los hijos de tinieblas, y los hijos
31    6,   XXVII|       hijos de tinieblas, y los hijos de luz no se queden tanto
32    7,     III|       que he dicho, casando sus hijos e hijas unos con otros,
33    7,      IV|         camino que hicieron los hijos de Israel, pues aquéllos,
34    7,       V|  naturales de Malinalco, como a hijos de tal madre. Los mejicanos,
35    7,    VIII|      que en tu casa y corte hay hijos de nuestra generación emparentada
36    7,      IX|  memorable, y fué que, teniendo hijos legítimos a quien pudiera
37    7,      IX| sujeción, con encomendarles sus hijos y mujer hizo fin, dejando
38    7,       X|   agoreros en dar nombres a sus hijos), mandó que llamasen a su
39    7,      XI|        sangre de los mejicanos. Hijos tenemos de los reyes pasados,
40    7,     XII|       muy excelentes príncipes, hijos del rey Acamapichtli, nuestro
41    7,     XII|      para tomar a cuestas a tus hijos, que son los pobres y gente
42    7,    XVII|        Donde se ve bien que los hijos no siempre sacan con la
43    7,   XVIII|   encomendó ahincadamente a sus hijos, especialmente al mayor,
44    7,   XXIII|       hacía matar sus mujeres y hijos, y destruir sus casas y
45    7,   XXIII|         decía muchas veces: ¡oh hijos míos, que ya se ha llegado
46    7,   XXIII|          Otras veces decía: ¡oh hijos míos! ¿dónde os llevaré,