Libro, Capítulo

 1  III,     III|       después lo que pareciere.~ ~Agora quedamos con esto, que el
 2  III,     XIX|          el disputarlo no es para agora.~ ~En esta tierra baja que
 3  III,     XIX|         todas, de la cual diremos agora.~ ~
 4  III,   XXIII|    eclipses del sol y de la luna. Agora, pues, los portugueses han
 5  III,    XXIV|           se ha visto salir hasta agora; hay recelo que salga, y
 6   IV,     III|    metales diré algo, dejando por agora los demás.~ ~
 7   IV,      IV|       Indias; de la plata diremos agora.~ ~
 8   IV,       V|          que dice Job, trataremos agora, diciendo primero que la
 9   IV,     VII| descubridor llaman Bebelo también agora. De esta mina se sacó tanta
10   IV,     VII|           hecho esta digresión, y agora volvamos a decir cómo se
11   IV,    VIII|           las vetas. Aunque hasta agora antes se ha mostrado lo
12   IV,      XI|        embijados ponían terror; y agora les parece que es mucha
13   IV,   XVIII|          sabré contarlas. Las que agora me ocurren, además de las
14   IV,   XXIII|         Perú no se han dado hasta agora; y en España, aunque he
15   IV,    XXXI|          que no se han dado hasta agora, que yo sepa, en Indias.
16   IV,   XXXII|        meses del año dan fruto; y agora sea por el podar las vides
17   IV,   XXXII|    terciopelos no se labran hasta agora. El azúcar es otra granjería
18   IV,  XXXIII|           en Nueva España, aunque agora sea la lana no ser tan fina,
19   IV,  XXXIII|          la lana no ser tan fina, agora los obrajes no labralla
20    V,      IV|          de los indios, baste por agora decir, que tenían un mismo
21    V,     XII|       ciudad del Cuzco, adonde es agora el monasterio de Santo Domingo,
22    V,    XXII|          por un rato. Dejando por agora la disputa de cómo se compadezca
23    V,    XXXI|  disimuladamente las usan también agora los indios; y para este
24    6,   XXVII|          en criar sus hijos, y si agora se tuviese el mismo orden
25    7,      II|      remota hacia el norte, donde agora se ha descubierto un reino
26    7,    VIII|       nuestro dios al sitio donde agora estamos, que cae en la jurisdicción
27    7,    VIII|      tierra, pues la que poseemos agora es ajena, y no sabemos lo
28    7,      XI|          mejor lo que pretendéis. Agora, ¿qué caudillo o cabeza
29    7,     XII|      otras razones, así: Mira que agora estamos pendientes de ti, ¿
30    7,    XIII|     vencidos, respondió él, desde agora nos obligamos de ponernos
31    7,   XVIII|        Tlatellulco y fué donde es agora Santiago. Estos alzados
32    7,      XX|         nueve dobleces del cielo, agora, obligándole el cargo de
33    7,      XX| importancia, no te haya de sobrar agora, donde tanto es menester? ¿
34    7,    XXII|          dignas de ponderar, como agora se verá.~ ~
35    7,    XXVI|           Cortés y le dijo: Hasta agora yo he hecho lo que he podido
36    7,    XXVI|           en defensa de los míos; agora no debo más sino darle ésta,
37    7,   XXVII|       españoles, que era donde es agora la iglesia mayor, siendo