Libro, Capítulo

 1    1,    VIII|     haber pasado se prueba bien, viendo cuán puntualmente sucede
 2   II,       V|          el Perú y Nueva España, viendo que aquellas dos cualidades
 3   II,      IX|   Aristóteles y de su filosofía, viendo que en el lugar y en el
 4  III,      XI|          cerros altos de tierra. Viendo que no le hallaban, a requerimiento
 5  III,      XI|       cincuenta y seis grados, y viendo que no habían dado al través,
 6  III,      XV|      triunfar tan gallardamente. Viendo esto, me he acordado muchas
 7  III,     XXV|     todos los volcanes pasa así, viendo que la materia que de sí
 8   IV,     VII|          los que saben de minas, viendo que lo mismo que ellos hoy
 9   IV,     XII|       fuego.~ ~Digo esto porque, viendo este artificio en Potosí,
10   IV,     XIV|         cajón lleno de ellas; en viendo tantas, dijo el italiano:
11   IV,   XXXIV|         probable y cuasi cierto, viendo que en islas grandísimas
12    V,     III|         de Melite, que es Malta, viendo que la víbora no hacía mal
13    V,       V|        muy delicado ingenio, que viendo cómo todos sus antepasados
14    6,      II|         para ver si amanecía. En viendo que venía el día, tocaban
15    6,   XXIII|   increíble dolor de los indios, viendo hacer públicamente justicia
16    7,     III|        Los bárbaros Chichimecos, viendo lo que pasaba, comenzaron
17    7,    VIII|     enemistad y bandos antiguos. Viendo, pues, los de Tenoxtitlán
18    7,      XI|    volviendo a nuestra historia, viendo el rey de Azcapuzalco la
19    7,     XII|         Mas el común del pueblo, viendo que los contrarios les sobrepujaban
20    7,     XII|         mató algunos de ellos, y viendo que cargaba gente, se retiró
21    7,     XIV|       guerra contra mejicanos, y viendo que no salían a ello, como
22    7,     XIV|      hizo retirar a su ciudad, y viendo que pretendían acogerse
23    7,     XVI|    comedidos y obligatorios. Él, viendo sus porfías, les dijo que,
24    7,   XVIII|          lo que ya podía sufrir. Viendo huir los de Tlatellulco
25    7,   XXIII|          con otros; y dicen, que viendo esto los de Jerusalén, suplicaban
26    7,   XXIII|          los ojos al cielo, y no viendo estrellas en él. Tornando
27    7,    XXIV|      cuanto pudieron y supieron; viendo que ninguna cosa les empecía
28    7,     XXV| sospechas y quejas y agravios, y viendo enajenados los ánimos de
29    7,    XXVI|  soldados que iban con ellos. En viendo a su señor Motezuma pararon
30    7,    XXVI|        fuesen faltando del todo, viendo que no había esperanza de
31    7,   XXVII|    aquella tierra, a los cuales, viendo el español que pasaban gran