Libro, Capítulo

 1  III,    VIII|         no bien seca, que levanta humo cuando la queman, y en cesando
 2  III,    VIII|          cesando la llama cesa el humo. Cualquiera que sea la causa
 3  III,    XVII| cenicienta, y todo él vaheando un humo de cosa quemada, y así corre
 4  III,    XVII|          le apagan aquel fuego, y humo que saca de su principio.
 5  III,    XXIV|   mirarlos. De estas bocas hechan humo y algunas veces fuego. Algunos
 6  III,    XXIV|    Algunos hay que es muy poco el humo que echan, y cuasi no tienen
 7  III,    XXIV|       gentilidad, y algún poco de humo alguna vez.~ ~El volcán
 8  III,    XXIV|         cada día un gran golpe de humo, y sale derecho en alto
 9  III,    XXIV|         horas. Sale a vueltas del humo también mucha ceniza: fuego
10  III,    XXIV|        volcán no solía echar sino humo, y eso no siempre; y algunas
11  III,    XXIV|      visto que no echan llama, ni humo, ni ceniza, sino allá en
12  III,     XXV|           tanto tiempo el fuego y humo de estos volcanes No hay
13  III,     XXV|         causa de durar el fuego y humo de estos volcanes, porque
14  III,     XXV|           continente lanzan de sí humo, fuego y ceniza.~ ~Plinio,
15  III,     XXV|          convierten en fuego y en humo, y con la fuerza de ellas
16  III,     XXV|         ser a tiempos el echar el humo, y no siempre, y a tiempos
17   IV,       X|           con azogue; y porque el humo del azogue es mortal, me
18   IV,       X|         boca les entrase de aquel humo mortal, y con esto se preservaban
19   IV,       X|       animales, que recibiendo su humo por la boca o narices, allá
20   IV,       X|         liviana del mundo, que es humo, con que sube arriba resuelto,
21   IV,       X|        resuelto, y luego el mismo humo, que es cosa tan liviana,
22   IV,       X|    resuelve. Porque en topando el humo de aquel metal cuerpo duro
23   IV,       X|       otra vez al azogue, se hace humo, y del humo torna sin dilación
24   IV,       X|       azogue, se hace humo, y del humo torna sin dilación a caer
25   IV,     XII|          exhalación a vueltas del humo del dicho fuego, y suele
26   IV,     XII|         frías, porque si da algún humo o vapor de aquél a las personas
27   IV,     XII|       cual el azogue se exhala en humo, y topando en el caperuzón
28   IV,    XIII|          lo que es plomo se va en humo, el cobre o estaño se deshace,
29    V,    XXVI|           seis dedos en ancho. El humo con que se tiznaban era
30    V,    XXIX|          cielo, como subían aquel humo a lo alto. Toda la demás
31    7,       X|      quiere decir rodela que echa humo. Con el contento que el