Libro, Capítulo

 1   II,     XIV|         y cada momento visita el corazón, y así le imprime sus propiedades.
 2   II,     XIV|          tierras si con generoso corazón quisiesen antes ser señores,
 3  III,   XXVII|     podemos decir que es como de corazón con los pulmones, lo más
 4  III,   XXVII|        lo más ancho de este como corazón es del Brasil al Perú: la
 5   IV,   XXVII|         que quiere decir flor de corazón, porque tiene la misma hechura
 6   IV,   XXVII|     tiene la misma hechura de un corazón, y aun en el tamaño no es
 7   IV,     XXX|       rayo desde lo alto, por el corazón, hasta abajo, y dicen que
 8   IV,    XLII|         Para melancolía y mal de corazón, y para calenturas pestíferas
 9   IV,    XLII|       llaman cornerinas, para el corazón, que, por no pertenecer
10    V,       I|         Ezequiel: 195 Elevóse tu corazón, y dijiste: Dios soy yo,
11    V,       V|   pensamiento, y se escureció su corazón necio, y vinieron a trocar
12    V,    XIII|        le abrían y le sacaban el corazón, como adelante se dirá.~ ~
13    V,   XVIII|      carne que está detrás de el corazón no se les había consumido
14    V,      XX|     sacrificaban, y sacándole el corazón medio vivo, al hombre lo
15    V,      XX|      cortar el pecho, y sacar el corazón del sacrificado, llamaban
16    V,      XX|         extraña, arrancándole el corazón con las manos; y así vaheando,
17    V,      XX|   ofrecía aquel calor y vaho del corazón; y luego volvía al ídolo
18    V,    XXII|     habiendo abierto y sacado el corazón a un mancebo muy bien dispuesto,
19    V,    XXII|          habiéndole arrancado el corazón, pues refiere Galeno234
20    V,    XXII|    después de haberles sacado el corazón y echándole en el altar,
21    V,    XXIX|         el pecho, y le sacaba el corazón, alzándolo en la mano todo
22    V,     XXX|           haciendo ofrenda de su corazón a la luna; y después arrojándolo
23    6,    XXII|    abriéronle, y las tripas y el corazón quedaron en Quito, por haberlo
24    7,       V|         le mataron y trajeron el corazón a su dios, el cual mandó
25    7,     VII|         mandado habían echado el corazón de Copil, su enemigo, hijo
26    7,     XII|     vuestros ojos, mas no la del corazón, porque dado que habéis
27    7,     XII| república Mejicana, quedó la del corazón para considerar, que si
28    7,     XII|         quien se inclina vuestro corazón, que ese es el que elige
29    7,      XX|         el de tu firme y animoso corazón, ni menos reposo, saber
30    7,      XX|         sueño le sobresaltará su corazón y le dejará desvelado el
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