Libro, Capítulo

 1    1,      XI|             natural, 64 que Hannón, capitán de los cartagineses, navegó
 2  III,      IX|   pesadumbre. Refería el sobredicho capitán que, de un buen ejército,
 3  III,       X|            y así le halló y pasó el capitán Ladrillero, cuya relación
 4  III,       X|         cosario; después le pasó el capitán Sarmiento por la banda del
 5  III,      XI| reconociesen el estrecho, yendo por capitán Pedro Sarmiento, hombre
 6  III,      XI|             que había hecho. Mas el capitán Pedro Sarmiento, de Cabo
 7  III,   XVIII|            hizo por el mismo río el capitán Pedro de Orsúa, y muerto
 8   IV,     XXI|         Plinio181 del otro Licinio, capitán romano, que con diez y ocho
 9    V,       V|           buena razón me contaba un capitán discreto y buen cristiano,
10    V,       V|        diósele tal, y preguntóle el capitán al cacique: dime, ¿quién
11    V,       V|          Pues eso mismo, replicó el capitán, pasa entre ese sol que
12    V,       V|        Cuadróles mucho la razón del capitán a todos, y dijo el cacique
13    V,     XXI|         sacrificio, y con nombre de capitán famoso; y como tal era después
14    6,     XIX|          tiempo de guerra eligen un capitán, a quien toda una nación
15    6,   XXVII|             carga al campo y volver capitán con insignia de honra: otros
16    7,      IV|        género humano. El caudillo y capitán que éstos seguían tenía
17    7,       V|        cuales habían elegido por su capitán a un valiente hombre llamado
18    7,     XII|          rey, y fué el más valeroso capitán, y de mayor consejo, que
19    7,    XIII|  prometieron), el rey nombró por su capitán general a Tlacaellel; y
20    7,      XV|     cruzadas las manos.~ ~Volvió el capitán Tlacaellel con gran triunfo,
21    7,    XVII|         villano, y deja el de rey o capitán a otro que lo sabe hacer;
22    7,   XVIII|             cargo e insignias de su capitán general, con todas las preeminencias
23    7,   XVIII|         llanto, por la muerte de su capitán, de todo el pueblo mejicano,
24    7,   XVIII|         ganó nombre de muy valiente capitán. Y no se contentó con rendir
25    7,   XVIII|             los de Tlatellulco a su capitán, también ellos desmayaron
26    7,    XXIV|           de alabanza este valeroso capitán), y si su traza fuera adelante,
27    7,     XXV|            y valor invencible de su capitán don Fernando Cortés, porque
28    7,     XXV|          Motezuma las victorias del capitán y que venía marchando en
29    7,    XXVI|             y los demás enviaron al capitán Cortés aviso del gran peligro
30    7,    XXVI|           de más defensa, acordó el capitán Cortés salirse una noche