Libro, Capítulo

 1    1,      XI|          parece, cierto, cosa muy extraña, que sea tamaño este mundo
 2    1,     XVI|       cortas respecto de esta tan extraña de mirar siempre al Norte,
 3   II,      VI|      todos los sucesos de aquella extraña entrada que hizo Pedro de
 4  III,      VI|        las velas van con igualdad extraña, sin ímpetu ninguno, y sin
 5  III,      IX|          y vahos del mar, lo cual extraña tanto el cuerpo y el estómago
 6  III,      IX|      principal movedor de aquella extraña indisposición y náusea,
 7  III,      IX|         se pase se siente aquella extraña destemplanza, aunque en
 8  III,      IX|     destemplanza y alteración tan extraña sea el viento o aire que
 9  III,      IX|        vicuñas, cuya propiedad es extraña, como se dirá en su lugar.
10  III,      IX|            Y aún añadía otra cosa extraña, que hallaron vivo un muchacho,
11  III,      XV|       cortaban carne y hueso, con extraña presteza, y así cercenaban
12  III,     XIX|           tierra del Perú, que es extraña entre todas, de la cual
13  III,   XXVII|           Compañía, que cierto es extraña, pueda dar mucha noticia.
14   IV,      IX|     riqueza, porque el azogue con extraña y maravillosa propiedad
15   IV,   XXIII|            y en esto es de la más extraña hechura que hay árbol porque
16   IV,  XXXVII|         género de cuervos: son de extraña ligereza, y no menos aguda
17   IV,  XXXVII|       otras colores finas, son de extraña hermosura; y mirada la imagen
18    V,    VIII|         Méjico (que los había con extraña observancia, como se dirá
19    V,     XIV|            En Méjico hubo en esto extraña curiosidad; y remedando
20    V,      XX|         cuchillo con una presteza extraña, arrancándole el corazón
21    6,       X|         curiosidad en los correos extraña, porque tenía el Inga en
22    6,     XII|          y otros particulares con extraña subordinación en tanto grado,
23    6,     XIV|    provincias, porque la labor es extraña y para espantar; y no usaban
24    6,      XV|  necesidad para los soldados, con extraña presteza y cuidado, y, cuando
25    7,     XVI| ceremonias, y teniendo obervancia extraña en su ley y vana superstición.
26    7,   XXIII|           anunció que venía gente extraña a poseer aquellos reinos.
27    7,   XXIII|     grulla y de su color, pero de extraña hechura, y no vista. Lleváronla
28    7,   XXVII|     tiempo.~ ~En la peregrinación extraña que escribe Cabeza de Vaca,
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