Libro, Capítulo

 1    1,    XXII|       en desaparecer toda tan presto, porque siendo isla mayor
 2   II,     VII|        si son muy recios, tan presto como levantan vapores, los
 3   II,     VII|       calor puede levantar de presto tantos vapores, y no puede
 4   II,     VII|    vapores, y no puede tan de presto consumirlos y resolverlos;
 5  III,      IX|       así no hay cosa que más presto, ni más poderosamente altere,
 6  III,      IX| aguardar compañero, por salir presto de aquel mal paraje, sólo
 7  III,      XV|     la enormidad de su cuerpo presto encalla, sin poder ir ni
 8  III,   XXIII|       sol les va saliendo más presto; los que navegan de oriente
 9  III,   XXIII|      como les va saliendo más presto; y los que van al ocaso,
10   IV,       X|      la abraza, aunque no tan presto como a el oro: y al cabo
11   IV,     XVI|    que se embriagan harto más presto que con vino de uvas. El
12    V,      VI|    eso acabaron sus vidas tan presto. Porque sucedió que sintiendo
13    V,    XXII|    indios habían recibido tan presto la ley de Jesucristo, y
14    V,    XXVI|    era imposible saberlas tan presto. Para hacer esta abusión
15    V,    XXIX| templo, procurando llegar más presto unos que otros a los platos
16    6,    XXVI|       animales fieros. Venían presto a manos con el enemigo,
17    7,       X|    tener necesidad de valerse presto de sus brazos, según se
18    7,       X|    tramando de alcanzar, como presto parecerá.~ ~
19    7,      XV|     con gran concierto, y así presto desbarataron a sus contrarios
20    7,      XV|       a su ciudad, la cual de presto también entraron, siguiéndoles
21    7,     XVI|      agüero que habían de ser presto destruídos.~ ~Y fué así
22    7,   XVIII|       El miedo todo lo enseña presto: Cantaron y graznaron, y
23    7,   XXIII|     mas ellos se desaparecían presto de la prisión, de que el
24    7,   XXIII|     su ley habían de acabarse presto.~ ~
25    7,    XXIV|   podían ir a verle, pero que presto volverían y se verían con