Libro, Capítulo

 1   II,      II|    donde anda el sol, son más calientes. Por esta orden excede en
 2   II,      II|    las demás provincias menos calientes: y así por el consiguiente
 3   II,    XIII|    unas tierras y pueblos más calientes que otros solo por participar
 4   II,    XIII|       noches de verano no son calientes ni congojosas, como en España?
 5   II,    XIII|       día, son las noches tan calientes, pesadas o congojosas, y
 6  III,      II|  enfermos y otros sanos, unos calientes y otros fríos, serenos y
 7  III,      XV| Hállanse en las playas y ríos calientes: en las playas o ríos fríos
 8  III,     XVI|   estas lagunas ser sumamente calientes.~ ~En fin del valle de Tarapaya,
 9  III,     XIX|     sino en estas tierras muy calientes. Entre estos dos extremos
10  III,      XX|     Charcas, donde hay valles calientes y de grandísima fertilidad,
11  III,    XXII|      que se dan en valles muy calientes, donde hay regadío de acequias.
12  III,    XXVI|     más allá dentro los humos calientes, que vienen a romper encendiéndose.
13   IV,     XVI|      se ponen al fuego, y así calientes se ponen a la mesa y se
14   IV,    XVII|      se da también en lugares calientes, hacen cierto guisado o
15   IV,      XX|      del Perú: dáse en valles calientes y de regadío. Hay ají de
16   IV,   XXIII|    para ropa; dáse en tierras calientes en los valles y costa del
17   IV,    XXIV|       Las paltas al revés son calientes y delicadas. Es el palto
18   IV,     XXV|     escrebir. Danse en partes calientes de la Nueva España estos
19   IV,   XXXII|      son comúnmente en valles calientes, donde tienen acequias y