Libro, Capítulo

 1    1,       X     |  ambos lados, las cuales, por caer entre el ardor de ésta y
 2   II,     XII(117)|          Diotis., cap. 15, de caer. Hiera.~ ~
 3  III,   XVIII     | Dorado tan afamado. Dejáronse caer de lo alto arrebatados del
 4  III,   XVIII     |     aunque se trastornaban al caer y ellos y sus canoas se
 5  III,   XVIII     |   aguas; pero son recios, por caer de la sierra, y tienen avenidas
 6  III,    XXIV     | ochenta y seis pasado sucedió caer cuasi toda la ciudad de
 7  III,    XXVI     |       de ochenta y uno, y fué caer de repente un pedazo grandísimo
 8   IV,       X     |     punto se cuaja, y torna a caer hecho azogue, y si dan fuego
 9   IV,       X     |     humo torna sin dilación a caer el licor del azogue. Cierto,
10   IV,     XII     |      allí se cuaja y vuelve a caer abajo. Cuando está hecha
11   IV,    XIII     |   sino que se queda fija, sin caer gota. En la color y en otras
12   IV,    XXXV     | Plinio; 190 o quizá dejándose caer en el agua cuando están
13    V,    XVII     |      de ellos, por no venir a caer en alguna flaqueza, se hendían
14    V,      XX     |       tal suerte, que dejando caer el cuchillo sobre el pecho,
15    V,     XXV     |    que cada uno ve al ojo, de caer de aquella balanza y ser
16    V,     XXX     | arrojándolo al ídolo, dejando caer el cuerpo por las gradas
17    6,     XIV     |   entendiendo que se había de caer luego toda la puente, que
18    7,     XII     |      has por ventura de dejar caer la carga que está sobre
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